En Marea ha decidido desaparecer como partido, aunque su disolución como organización «no será inmediata» y, mientras tanto, prestará apoyo a las «cuarenta» candidaturas municipalistas afines que tienen representación en distintas corporaciones locales de Galicia.
Así lo han decidido los 52 inscritos (37 de forma presencial y otros 12 por vía telemática) que han participado en un plenario celebrado en el Hotel Congreso de Teo, en el que, tras el batacazo electoral de las autonómicas de julio, estaba sobre la mesa disolver el partido o seguir adelante con la renovación de sus órganos de dirección.
Sin embargo, finalmente han optado por una vía intermedia: desparecer como organización política pero posponer ‘sine die’ la liquidación del partido para seguir «apoyando» a las mareas municipalistas que continúan activas.
Así lo han explicado los portavoces de la organización Pancho Casal y María Chao en una rueda de prensa posterior al plenario, en la que han explicado que En Marea no quiere «ser un obstáculo» para que surja un «nuevo proyecto» que catalice los ideales de un movimiento que consideran todavía vivos. Según Casal, en el momento en que exista ese «nuevo proyecto», En Marea certificará su disolución, para la que ya «inician los trámites».
En Marea nació como partido en el verano de 2016 para representar en las urnas a las fuerzas de la izquierda que, entonces, se encontraban en pleno auge. Sin embargo, las luchas internas derivaron en que los principales promotores de aquel partido instrumental (Anova, Esquerda Unida, Podemos y las mareas de Santiago y A Coruña) se apartasen del sector que retuvo el control de la marca con la que el autodenominado proyecto de ‘unidad popular’ logró ser segunda fuerza parlamentaria en la pasada legislatura.
Cuatro años después y con ambos bandos fuera de la instituciones autonómicas, la En Marea que lideró el magistrado Luís Villares hasta que decidió abandonar la primera línea política se encamina a su disolución, como así han acordado las 52 personas que participaron en el plenario de este sábado.
Pero la desaparición no será inmediata porque, según ha explicado Pancho Casal, «irse para casa sería una posición casi indigna». «Tenemos una responsabilidad ineludible de seguir trabajando en la solución de los problemas de Galicia«, ha manifestado el que fue cabeza de lista de Marea Galeguista, coalición en la que participaba En Marea junto con Compromiso por Galicia y Partido Galeguista y que fracasó en las urnas al obtener el 0,22% de las votos en las elecciones autonómicas del pasado mes de julio.
«El electorado nos castigó de una forma absolutamente merecida por toda nuestra trayectoria. No podemos seguir, teniendo en cuenta lo que dijo la ciudadanía», ha manifestado Casal.
De este modo, la resolución aprobada este sábado por En Marea apuesta por iniciar los trámites para disolverese como organización, hibernando su acción política pero sin efectivizar su desaparición por el momento.
Una disolución para la que «no hay plazos» y que se tomará cuando exista un «nuevo proyecto» que represente un espacio político que creen que todavía «existe» en la sociedad gallega y que, según Casal, En Marea «no está en disposición de protagonizar pero sí de acompañar».
«No queremos ser un obstáculo. Iniciamos los trámites para tener todo listo para que, en ese momento en que esté listo un nuevo proyecto, En Marea estará absolutamente preparada para disolverse», ha incidido Casal, que ha confirmado la extinción de la coordinadora (ejecutiva) del partido, que mantendrá la actual composición del Consello das Mareas (máximo órgano de dirección entre plenarios) hasta que formaliza su desparición.
Mientras tanto, En Marea «va a poner todo su patrimonio material e inmaterial» a diposición de las candidaturas locales todavía activas e invita a «aquellas personas» que participaron a lo largo de estos años en el espacio político a continuar trabajando por «un galleguismo trasversal, democrático, amable» y «diferenciado de las propuestas del PP».
En la resolución política aprobada por el plenario (con 45 votos a favor, cuatro en contra y tres abstenciones), el partido hace un reconocimiento a Luís Villares, referente del bando que rivalizó con Podemos, Esquerda Unida, Anova y las mareas de Santiago y A Coruña por el control de la marca y que terminó haciéndose con ella tras unas polémicas primarias en las que las tensas relaciones internas terminaron por estallar.
«Siempre será nuestro portavoz», ha dicho María Chao en referencia a Villares durante la rueda de prensa, en la que también han recordado la aportación al proyecto de Ana Seijas, Victoria Esteban o Mariló Candedo, que también ejercieron portavocías en la organización y que, del mismo modo que el magistrado lucense, abandonaron el partido y la primera línea política.