El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afirmado este lunes que solo un 0,2 por ciento de los contagios de Covid-19 que ha tenido la Comunidad de Madrid desde que terminó el estado de alarma procede del aeropuerto de Barajas.
Así lo ha asegurado en rueda de prensa junto a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, tras una reunión en la que ésta ha vuelto a insistir en que aumentar los tests en el aeropuerto madrileño.
Sánchez le ha respondido que él está dispuesto a estudiar más medidas y que no tiene «ningún problema en reforzar el control preventivo», pero que cree que «hay que focalizar esfuerzos» allá donde los técnicos dicen que está el problema.
Con todo, ambos responsables se han esforzado en lanzar un mensaje de unidad para frenar la expansión del virus en Madrid. Sánchez ha incidido en que no pretendía «tutelar» al Gobierno regional y en que ésta es «una batalla epidemiológica, no ideológica» y Ayuso ha pedido a la oposición en la comunidad de Madrid que aparque por un tiempo el «activismo» y vuelva a la solidaridad que hizo posible «ir todos en la misma dirección» en los meses de marzo y abril.
Preguntado por las convocatorias de manifestaciones contra los confinamientos de varios barrios de Madrid, con apoyo de PSOE y de Podemos, Sánchez ha afirmado que la posición del Gobierno de España y la suya personal es que la pandemia «merece la unión de todos» y que «no es tiempo de reproches sino de unidad», y que ya habrá tiempo para la «dialéctica partidista».
Sánchez ha reconocido que Madrid tiene singularidades que no tienen otras comunidades autónomas, y eso «no es consecuencia del Gobierno autonómico» sino de su densidad de población, comunicaciones e infraestructuras, y por ello ha justificado la necesidad de un plan especial para Madrid con el objetivo de «salvar vidas».