Las frutas son un alimento que no puede faltar en una dieta equilibrada, tal y como indican todos los organismos de salud. La recomendación es consumir al menos tres piezas al día de fruta fresca (no, no valen las conservas en almíbar), para obtener todos los nutrientes que necesita el cuerpo para una buena salud. A algunas personas les da un poco de pereza pero es importante superarla y adquirir el hábito. Es tan sencillo como dejarla troceada en la nevera, preparar macedonias o convertirla en nuestro postre o merienda habitual. Otra de las excusas frecuentes es que son demasiado ricas en azúcares como glucosa y fructosa, y por lo tanto pueden afectar a nuestro peso y hacernos engordar. Pero esto tiene bastante de mito.
1LA FRUTA AYUDA A CONTROLAR EL PESO
Existen muchas variedades de frutas y algunas tienen más calorías que otras. Si estamos en una dieta hipocalórica hemos de escoger las más ligeras, pero nunca prescindir de nuestras frutas diarias. Además tiene un doble beneficio porque nos puede ayudar a controlar el peso. Contienen fibra, por lo que la absorción de los azúcares se realiza de forma muy lenta, algo que nuestro páncreas agradece porque no tiene que segregar más insulina. La fibra también es excelente para combatir el estreñimiento y es un prebiótico imprescindible para la flora intestinal. Además contiene una gran cantidad de agua que contribuyen a mantenernos hidratados. En este artículo seleccionamos las frutas menos calóricas que puedes comer sin miedo a engordar incluso si estás a dieta.