Uno de los 33 inmigrantes encarcelados el pasado 28 de agosto por participar en el motín en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla registrado el día 26 ha dado este domingo positivo en el Centro Penitenciario de Melilla, el primer caso de coronavirus en la prisión desde que se inició la pandemia a mediados de marzo de 2020.
Según ha informado la sección sindical de CSIF-Prisiones, uno de los 33 «amotinados» llevaba aislado en enfermería desde el día 2 de septiembre tras presentar síntomas, motivo por el que le hicieron las pruebas PCR el viernes día 4, y que ahora han resultado positivo en Covid-19.
El sindicato, por ello, ha solicitado al director del Centro Penitenciario «un protocolo de actuación específico para cada módulo del centro para tratar de evitar la transmisión del virus».
También ha demando que se proporcione material de protección de mascarillas FFP2 y caretas «a los funcionarios que realicen servicio en aquellos módulos donde exista riesgo de transmisión».
Igualmente, ha exigido que se realicen las pruebas PCR «a los 32 internos restantes que ingresaron del CETI, así como a los trabajadores del centro y a aquellos internos que han tenido un contacto directo». Además, ha reclamado que «se restrinjan las actividades que conlleven contacto intermodular como gimnasios, cursos de pintura y fontanería».
Por último, CSIF ha vuelto a pedir a la dirección, como ya hicieron «hace meses y no se ha cumplido», «que se tome la temperatura a todo el personal que entre o salga del Centro Penitenciario».