La cantante Sole Giménez y el vocalista de Seguridad Social, José Manuel Casañ, se han referido este lunes a la situación de «parálisis» que atraviesa el sector a raíz de la pandemia del coronavirus.
Los dos intérpretes, que han participado en la presentación de las medidas de seguridad con las que contará el ciclo musical ‘A la llum de la lluna’, en el que actuarán y que arranca el 25 de septiembre en el Monasterio de San Miguel de los Reyes de València, han apostado por la «cultura segura» para que este tipo de eventos puedan realizarse y demandan ayudas por parte de las instituciones.
Para estos artistas es «un privilegio» participar en este evento ya que el sector cultural se encuentra «muy perjudicado» debido a la crisis causada por la Covid-19.
«Es la primera actuación que tenemos este verano», ha lamentado Casañ que también ha declarado que «se ha paralizado todo, no solo para músicos y artistas, sino también para transportistas, técnicos o promotores». «Yo creo que se puede hacer todo respetando las medidas de seguridad, es mejor tener un ocio controlado que uno descontrolado», ha añadido el cantante.
Para Casañ, solo las instituciones pueden soportar este tipo de eventos con un aforo tan reducido como el de ‘A la llum de la lluna’, ya que para los promotores «no es rentable, por mucho que se bajen los cachés». «Los únicos que pueden apoyarnos son las instituciones y estamos totalmente desprotegidos», ha remarcado.
En este sentido, Sole Giménez ha manifestado que la gestión de la pandemia en cuanto al sector cultural en comparación con otros ámbitos le parece «incongruente». La cantante ha asegurado no entender cómo se permite «ir en un AVE abarrotado de gente y, sin embargo, no se pueda acudir a una sala para escuchar música en directo».
«Esperemos que esto no dure mucho porque el mundo de la cultura está paralizado ahora mismo», ha indicado, a la vez que ha lamentado en referencia al sector musical que «nadie se atreve a sacar un disco.
Por otro lado, el ilustrador Paco Roca, que también participa en el ciclo, ha lamentado la bajada de ventas de cómics durante el confinamiento debido al cierre de las librerías, aunque ha celebrado que «la gente ha vuelto con muchas ganas a las librerías y lo que no hemos vendido durante la pandemia lo hemos vendido después».
