La Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA) asegura haber detectado este verano «un aumento alarmante» de casos de retención ilícita de niños y niñas en el extranjero por parte de padres y madres divorciados que se excusan en la elevada incidencia de la COVID-19 en España y en la falta de directrices ante el inicio del curso escolar.
«Los progenitores se llevan a sus hijos de vacaciones a sus países de origen o de residencia, fuera de España, y aprovechan la situación desbocada de la COVID-19 y la incertidumbre que domina todo lo relacionado con el próximo año académico para retener de manera ilícita a los menores y no devolverlos a sus exparejas», afirma la vocal de la AEAFA María Dolores López-Muelas, abogada que también ha tratado en su despacho este tipo de situaciones este verano.
Según la asociación, la COVID-19 no exime de devolver a los menores. «En estos casos, los padres y madres perjudicados deben recurrir a los tribunales para conseguir la devolución de los hijos, lo que supone un esfuerzo económico y un impacto emocional para progenitores y menores», señala la vocal de AEAFA.
De momento, los tribunales extranjeros están dando la razón a los progenitores afectados al considerar que la COVID-19 no les exime de devolver a los menores, según señala María Dolores López-Muelas.
No obstante, la vocal de AEAFA señala que la imagen sanitaria de España en relación con el coronavirus y el inicio del curso escolar «no están ayudando» en estos casos y teme que en algún momento un tribunal extranjero pueda adoptar una medida diferente a las señaladas hasta ahora.
Tal y como advierte la asociación, los casos de sustracción de menores en España han aumentado de manera significativa en los últimos años. Los últimos datos del Ministerio del Interior indican que un total de 323 menores fueron sustraídos en España en 2017.