Las peticiones más o menos explícitas de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz a Podemos para que vuelva a formar parte de un espacio similar al que se conjugó en julio de 2023 bajo la marca Sumar están cayendo en saco roto.
Fuentes de la formación morada explican a MONCLOA.com que la decisión de la dirección y el ánimo de la militancia es proseguir el camino en solitario tras varios años de ataques internos (tanto del partido por el ‘errejonismo’ como de los aliados, véanse el ‘carmenismo’ y el ‘yolandismo’).
Podemos ha recuperado el autoestima gracias al resultado de las elecciones europeas; vuelve abrazar las banderas del 15M, el 8M y la República; cuenta con un liderazgo natural en la figura de Irene Montero; sube en todas las encuestas; ha celebrado primarias regionales que han arrojado resultados favorables a los deseos de la dirección estatal; cuenta con un conglomerado mediático que está engrasando Pablo Iglesias; y han vuelto a los grandes platós gracias a RTVE.
Los de Ione Belarra rechazan la teoría del PSOE y Sumar, que aseguran que hay que conformar una conjunción ‘antifascista’ para que el Gobierno se mantenga en manos del centro-izquierda a partir de 2027.
El problema es que la tesis de Podemos dice que la izquierda pasará a la oposición, y para ellos habrá una gran oportunidad de crecimiento ante el previsible desgaste de PSOE y Sumar por la actual legislatura en el poder.
CRUCE DE RECADOS
Los cantos de sirena de Yolanda Díaz provocaron la reacción de Podemos a través de su secretario de Organización Pablo Fernández. «Ante estas declaraciones nosotros lo que hacemos es pedir a Pedro Sánchez que aclare si las palabras de Yolanda Díaz están motivadas por una voluntad de adelanto electoral ante la debilidad evidente de este Gobierno», aseguró.
«Nuestra postura la hemos enunciado en innumerables ocasiones, pero sí que nos gustaría tener una aclaración expresa del presidente Sánchez. Si no, no se explican estas declaraciones de Yolanda», añadió el portavoz morado. Fernández se refería a las palabras de la vicepresidenta durante un desayuno informativo organizado por Europa Press. «Yo voy a trabajar para que lo que ha pasado el 23J vuelva a pasar. Y quien no quiera estar ahí lo tiene que explicar. Porque sabemos cómo funciona la ley D’Hondt».
Más explícita fue en una entrevista concedida a La Vanguardia: «Nosotros damos batallas importantes en lo que creemos que es sustancial. Somos conscientes de que la disputa es democrática, y podemos ponernos de acuerdo en algo, elevarnos. Desde luego, yo estoy en la misma posición que el 23 de julio y me consta que se está trabajando para que esto sea así, y eso es muy importante».
«Yo lo que le pido a todo el mundo es un ejercicio de estar a la altura. La democracia va de ganar derechos. Y ya hemos visto lo que hace el PP y lo que hizo Vox cuando estaba en los gobiernos de coalición. Están lapidando la sanidad pública y la educación pública», continuó.
Díaz se negó a excluirse como candidata futura del espacio pese a los recelos que despierta hasta en formaciones como Izquierda Unida: «Esto no toca ahora. Estoy gobernando el país y espero reducir la jornada laboral. Este debate no se me pasa por la cabeza».
La gestión que Díaz ha realizado del espacio progresista, y su personalismo a la hora de tomar decisiones dentro del grupo parlamentario de Sumar, han agrietado sus relaciones con IU y han despertado recelos en Catalunya en Común.
En sectores de IU y los ‘Comunes’ existe cierta nostalgia de Unidas Podemos, que nació en 2016, entró en el Gobierno en 2020 y sigue viva en ayuntamientos y algunos parlamentos regionales.