El informe de Óscar Puente remitido al Tribunal Supremo para desmontar las acusaciones de Víctor de Aldama en el caso Koldo apunta a un polémico contrato: la remodelación del enlace de la A-4 con la SE-20. El anuncio de esta licitación se realizó con Raquel Sánchez al frente del Ministerio de Transportes, mientras que la formalización del mismo se hizo con Óscar Puente al frente del organismo público.
A diferencia de la mayoría de las 39 obras señaladas en el informe de Puente, en este contrato no consta modificación o rectificación alguna. No hay un cambio del contrato tras haberse adjudicado, pero la ganadora no obtuvo ni la mejor nota técnica ni tampoco su oferta económica fue la más competitiva para los intereses del conjunto de los españoles. Eso sí, la empresa Lantania, señalada por Aldama, testigo de cargo y principal imputado en el caso Koldo, fue la elección de la mesa de contratación.
Las obras se iniciaron el pasado mes de junio, con Puente preparando su informe contra el exministro José Luis Ábalos por los contratos de las mascarillas, un ‘compliance’ al que se sometió a un extenso interrogatorio a los responsables y altos cargos sin que estuviera presente su abogado. Algunos de estos cargos fueron cesados de forma fulminante, mientras el auditor no preguntó a Ábalos.
Para la remodelación de este enlace en la SE-20, estipulada en el plazo de dos años, la mesa de contratación otorgó la máxima puntuación técnica a la UTE Adiante Infrestructuras y Construcciones Maygar, con 100 puntos sobre 100 posibles, que quedó sorpresivamente fuera de la convocatoria por una «baja temeraria» en su oferta económica. Exactamente lo mismo ocurrió con otro de los contratos licitados durante la etapa de Raquel Sánchez y del que ha dado buena cuenta este medio.
LA ANOMALÍA DEL CONTRATO SE CENTRA EN LAS EXCLUIDAS POR BAJA TEMERARIA
En esta licitación, además, ocurre una anomalía respecto a los anteriores analizados por Moncloa. Es la adjudicación con mayor número de exclusiones y ofertas temerarias, con un total de 11 ofertas, cuando en los anteriores había una o dos ofertas polémicas o que podrían detectarse en baja temeraria.
La nota técnica de Lantania, ganadora del concurso público, estaba muy por debajo de otras empresas. En concreto, obtuvo 78,36 puntos, por debajo de notas muy altas, como las cosechadas por Construcciones Sánchez Domínguez y Construcciones Garrucho; Construcciones Sarrión; Martín Casillas y Heliopol, que casi rozaron la perfección; la UTE Gévora; Firmes y asfaltados del Sur; Azvi -empresa señalada por Aldama- y Aldesa Construcciones. Todas ellas registraron notas muy elevadas en la parte técnica de este contrato. Hasta siete propuestas técnicas superaron con creces a la de Lantania.
En cuanto a la oferta económica, la de Lantania no fue ni mucho menos la mejor de todas ellas. Hasta siete empresas con la máxima calificación técnica realizaron una oferta más competitiva respecto a la firma señalada por Aldama. La mesa de contratación apuntó que eran ofertas que caían en el margen temerario, a pesar de estar separadas por apenas 250.000 euros, es decir, tan solo un 1% de la ganadora.
LAS MEJORES NOTAS TÉCNICAS Y ECONÓMICAS FUERON EXCLUIDAS EN EL CONTRATO DE RAQUEL SÁNCHEZ
El informe de Puente no da cuenta de que fueron eliminadas por temerarias las ofertas económicas de Adiante Infraestructuras, la mejor oferta técnica, por «no explicar satisfactoriamente el bajo nivel de los precios o costes propuesto por el licitador».
En el caso de Aldesa, que tan solo reducía su beneficio con la obra teniendo en cuenta las circunstancias estructurales y socioeconómicas de las Empresas. «Aun siendo conscientes de que la baja ofrecida puede suponer una disminución de los beneficios normalmente esperados, en ningún momento constituyen deterioro o quebranto alguno de las estructuras económicas de la empresa, ratificándose plenamente en el importe ofertado». Para la mesa de contratación, esta justificación «no permiten explicar satisfactoriamente el bajo nivel de los precios o costes propuesto por el licitador».
LA FRASE EN LA MESA DE CONTRATACIÓN: «NO PERMITE EXPLICAR SATISFACTORIAMENTE»
En el caso de Azvi, exactamente la misma respuesta que la anterior; mientras que CHM Obras e Infraestructuras argumentó que su oferta se obtuvo por la suma de dos conceptos básicos, por un lado, el coste directo de las unidades de obra, valoradas a precios de mercado y los costes indirectos. Para la mesa, tampoco era justificación.
Construcciones Sarrión, por su parte, realizó un estudio detallado de todos los costes, compras y suministros, más cuando tenía cerca obras para poder alimentar en caso necesario a la licitación anunciada por Raquel Sánchez. «Esta empresa cuenta con varias obras y servicios ubicadas a pocos kilómetros de la zona de obras de la Licitación, ratificándose en el importe ofertado», explicó la firma, pero la mesa de contratación la expulsó.
San José, por su parte, ofertó 20,81 millones, pero para el licitador no había explicado bien el bajo nivel de precios o costes. En el caso de Eiffage Infraestructuras, cuya oferta era más competitiva al disponer en propiedad de la maquinaria y medios necesarios para la correcta ejecución de las obras, pero la mesa rechazó las razones al no «explicar satisfactoriamente el bajo nivel de los precios o costes propuesto por el licitador».
La misma respuesta obtuvieron Extraco, Ferrovial Construcción y Firmes y asfaltados del Sur, que no necesita pedir materiales a terceros al ser dueña de varias canteras. En el caso de Martin Casillas y Heliopol, más de lo mismo, como Abaldo y Gévora. En esa mesa de contratación pasaron otros contratos señalados por Aldama y en el caso de esta adjudicación fue firmada por Ángel Domingo Salazar y Juan Fernando Pedrazo.