León es conocido por sus paisajes imponentes y sus tradiciones arraigadas, pero lo que muchos no saben es que alberga un rincón de ensueño que se transforma con cada estación: el Faedo de Ciñera. Este hayedo, ubicado a solo 40 kilómetros de la capital leonesa, se llena de colores en otoño y primavera, atrayendo a visitantes de todas partes. Su belleza y conservación lo han convertido en uno de los destinos naturales más emblemáticos de León.