El último jaleo de Defensa calienta la cabeza a los militares. Alta graduación y militares de tradición familiar son los que están más calentitos con este tema: la postura española sobre el Sáhara Occidental. Una patata caliente desde hace poco más de tres años, que el ejecutivo de Pedro Sánchez trata de encajar en la sociedad española y en su gabinete. Está vez ha tocado en el Ministerio Defensa, que se ve obligado a dar «doctrina» a los militares a la hora de expresar sus pensamiento y sentimientos respecto a este tema.
Con todo esto Margarita Robles, ministra de Defensa, va a tener que volver a tragar con la postura del presidente del Gobierno que no es la mayoritaria que hay en el partido. En el propio seno de la formación hay y ha habido voces discordantes con la decisión de Sánchez de apoyar de forma unilateralmente el proyecto de marroquí de autonomía para el territorio que ocupó en 1975.
Cabe recordar que Sánchez el 18 de marzo de 2022, de una forma sorprendente, cambió la postura histórica de España respecto a este tema. Hasta entonces nuestro país se plegaba a las resoluciones de la ONU que reconocía el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui. Después de la citada fecha el presidente del Gobierno español declaró en una carta dirigida al Rey de Marruecos, Mohamed VI, que «España considera la iniciativa marroquí de autonomía sobre el Sáhara Occidental como la base más seria, realista y creíble para resolver el contencioso». La sumisión total de España ante el rey alauita y el enfado, según indicaron fuentes de Defensa, de la titular de la cartera, Margarita Robles.
INSTRUCCIONES SOBRE EL TEMA
El caso es que a la Dirección General de Política de Defensa del Ministerio de Defensa ha recibido desde el entorno del pro marroquí y pro francés, José Manuel Albares Bueno, ministro de Asuntos Exteriores, Unión europea y Cooperación unas ordenes muy precisas sobre como unas deberían opinar desde este momento los militares sobre tan escabroso y sensible tema.
Unas órdenes que buscan unanimidad de opinión y sumisión en un colectivo como es el de las Fuerzas Armadas que es bastante reacio a la postura oficial del Gobierno. En algunos casos por motivos de seguridad, consideran un aliado más fiable al entorno argelino y saharaui en temas de migración principalmente, por un lado. Mientras por otra parte, recuerdan la humillación que supuso para el ejercito español la retirada del Sáhara Occidental en 1976 tras la conocida como ‘Marcha verde’.
En este último sentido, hay que recordar que bastantes soldados en su retirada final facilitaron armas a los saharauis para defenderse de esa invasión marroquí e incluso algunos fueron como voluntarios a las filas del Frente Polisario, formando e incluso combatiendo en la guerra desatada entre 1975 y 1991.
Por todo esto, el tema sigue escociendo bastante dentro de los militares españoles y de la propia ministra que se ha visto obligada a adoctrinar a «su gente» para evitar conflictos de intereses con el Ministerio de Exteriores, bastante dócil con la postura del Reino Alauita. Un tema en el que Robles está a favor de respetar los mandatos de la ONU como siempre ha hecho España, sin las ambigüedades que se tienen ahora que por un lado se defiende la propuesta de autonomía marroquí y por otro de apoya las resoluciones de la ONU defendiendo el referéndum de autodeterminación.
UNIFICACIÓN DE POSTURAS A LA FUERZA
A pesar que algunas asociaciones de militares niegan tener conocimiento de este tema y otras que no ha recibido noticias en una exclusiva del el periódico El Debate se cuenta que la Dirección General de Política (Digenpol) considera que por el interés general de la cuestión, las directrices relativas a la misma «deben ser de aplicación a todo el personal de las FAS, motivo por el que se remiten al Estado Mayor Conjunto de la Defensa (EMACON):
1) Si en un foro, independientemente de su naturaleza, en el que participa personal militar español, se suscitase esta cuestión, con carácter general se evitará pronunciarse al respecto. De ser requerido a hacerlo y considerar necesario por razones protocolarias dar una respuesta, ésta será la de que «en el ámbito del Ministerio de Defensa no hay una postura específica en relación con este tema», remitiendo a los posibles interesados a la postura oficial española sobre el asunto, definida por el MAUEC (Ministerio de Asuntos Exteriores), sin explicitarla y señalando que podrá accederse a ella en la documentación pública de ese ministerio.
2) Independientemente del punto anterior, todo militar que por su actividad pueda verse relacionado con dicha cuestión deberá conocer la postura oficial mencionada, enunciada en el párrafo segundo de este mensaje», subraya la misiva.
RESPUESTA DEL ENTORNO SAHARAUI AL PSOE
En repuesta a esta situación el conocido escritor y activista saharaui, Taleb Alisalem, remarcó a MONCLOA.COM que es «lamentable que el PSOE siga en esta línea. Nosotros no pedimos que se posicione a favor nuestra, simplemente que esté a favor de las resoluciones de la legalidad internacional. «Como marcan Naciones Unidas o la propia Unión Europea que en octubre en una resolución, derecho recurso, aseguró que Marruecos no tenía ninguna soberanía sobre el territorio del Sáhara Occidental», aclara el activista.
«La posición del PSOE no solo atenta contra los anhelos y la lucha del pueblo saharaui, sino que atenta directamente contra la legalidad internacional y las diferentes resoluciones de la ONU y la UE«, afirma Alisalem. Además, el escritor saharaui afirmó que «el Partido Socialista desde hace ya varios años tiene completamente secuestrada la política exterior española para servir de forma directa al régimen marroquí y servirse del lobby marroquí que actúa en España para el propio interés del partido».
«Sinceramente creo que ahora el PSOE no solo quiere secuestrar a la política exterior española, también quiere secuestrar al ejercito español para controlar todo el relato y convertirlo en una milicia a favor del PSOE», puntualiza. «Con este paso el PSOE pone al servicio de la política expansionista de Marruecos al ejército español, hoy es el Sáhara Occidental y mañana pedirán la soberanía de Ceuta y Melilla como ya hacen y el PSOE calla», reprocha una de las voces más importantes de la disidencia saharaui en España.