La situación en la Comunitat Valenciana tras la DANA de septiembre ha alcanzado niveles críticos, especialmente en lo referente a la infraestructura sanitaria. Los sistemas de agua y saneamiento en los municipios afectados se encuentran en una situación extremadamente grave, con gran parte del alcantarillado colapsado y una preocupante acumulación de aguas fecales que supone un riesgo significativo para la salud pública.
La respuesta humanitaria ha sido inmediata, con más de 40 organizaciones trabajando sobre el terreno y la movilización de más de 7.000 profesionales y voluntarios. Entre las acciones más urgentes destaca la contratación de maquinaria pesada para hacer frente al colapso de infraestructuras, aunque se señala la necesidad de que las administraciones públicas asuman progresivamente estas tareas.
Impacto en la infancia y respuesta psicosocial
Uno de los aspectos más preocupantes es la situación de niños, niñas y adolescentes, quienes se encuentran especialmente vulnerables ante esta crisis. La falta de espacios seguros y las condiciones de insalubridad han limitado severamente sus posibilidades de socialización y esparcimiento, afectando directamente a su bienestar emocional.
Organizaciones como Save The Children, Educo y Plan Internacional están realizando una evaluación exhaustiva de las necesidades educativas y de protección infantil. Se han establecido espacios de apoyo psicosocial específicos para este colectivo, mientras que otras organizaciones como Juntos por la Vida han organizado actividades recreativas en entornos seguros.
Coordinación y distribución de ayuda humanitaria
La respuesta humanitaria ha sido integral, incluyendo:
- Distribución de más de 40.000 kits de higiene
- Instalación de plantas potabilizadoras con capacidad para 15.000 personas
- Reparto de tarjetas monedero para apoyo económico
- Servicios de asesoramiento para la solicitud de ayudas oficiales
- Asistencia específica para agricultores afectados
El presidente de la Coordinadora Valenciana de ONGD, Enrique Asensi, insiste en la necesidad de reforzar los Servicios Sociales municipales y autonómicos, así como mejorar la coordinación con la Generalitat Valenciana. Es fundamental garantizar que las ayudas lleguen a todas las personas que las necesitan, sin dejar a nadie atrás en este proceso de recuperación.