Vox fracasó este jueves pasado en el intento de crear una nueva Rosa Parks en el distrito de Hortaleza. Allí la formación que lidera Santiago Abascal no puedo sacar adelante una propuesta para prohibir a los menores no acompañados (Menas) sentarse en las marquesinas de los autobuses cercanos al centro de acogida donde estos menores se encuentran.
El pleno y la votación fue tenso, representantes de Más Madrid y de la ONG Somos acogida, la cual atiende a muchos de estos menores, discutieron acaloradamente con José Miguel Plá Pascual que junto a Susana Córdoba fueron los encargados de presentar dicha propuesta ante la Junta Municipal de distrito.
Por otro lado, desde el Gobierno central se apresuraron a señalar que Vox podría incurrir en u delito de odio ante la propuesta de semejante orden. Una idea refrendada desde el Ministerio de Juventud e Infancia, dirigido por Sira Riego. Desde el entorno de la ministra se asegura que van a seguir atentamente todas las propuestas de esa formación que puedan contener temas que atenten contra la infancia y la juventud, especialmente racista y discriminatorio contra los más vulnerables.
MÁS MADRID APROVECHA EL RACISMO PARA CLAVAR PULLA AL PP POR VOX
Desde hace semanas Más Madrid se ha centrado en denunciar la propuesta, que según el partido progresista, es «xenófoba» y «contraria a los derechos humanos, a los derechos de la infancia y a la Constitución española». Más Madrid, con su portavoz en el distrito de Hortaleza, Miguel Montejo, reclamó a Vox que «quien son ellos para decidir quien puede sentarse o no en las marquesinas de un autobús.
La propia formación remarca que esta propuesta es «segregacionista» y que luchará por todos los medios para evitar políticas y actitudes racistas en Madrid. Pero tampoco dejo pasar ocasión para acusar al Partido Popular por su «supuesta cercanía» con vox, especialmente en las supuestamente políticas racistas que los populares comparten con Vox y su «espectro» electoral. Algo que ha chirriado bastante en la bancada popular del Ayuntamiento de Madrid que lleva meses respondiendo a este tipo de acusaciones
En este sentido, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha afirmado que no está «ni con el mensaje que lanza Vox, siempre de inseguridad de los menas señalándoles, ni con la izquierda que señala como racistas a cualquiera que no comparte sus planteamientos«. Además, el edil ha declarado que perseguirá el «uso indebido de las marquesinas» de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de la capital independientemente de quien lo realice, sin importar raza, color o condición social.
«El Ayuntamiento persigue comportamientos no personas», concluyó Almeida. Algo que para la oposición de izquierdas sigue siendo un discurso débil y tibio contra las actitudes racistas y xenófobas por parte de los populares. Unas acusaciones que el alcalde replicó remarcado que su su Gobierno se sitúa «siempre en el lado de los ciudadanos» y del «sentido común». «Si lo que se pretende es sacar un titular a costa de las menas, pues nosotros no vamos a cooperar», apostilló el edil popular.
EXPLICACIÓN DE VOX
Pero está polémica no esta estaría completa sin que la parte acusada de racista no diera su exposición de los hechos y sus motivos queden explicados. Desde Vox indican que esta propuesta se enmarca en la inseguridad, que según ellos, vive el citado distrito de Hortaleza.
En este sentido, desde la formación ultraderechista explicaron que su medida viene a pedir más presencia policial en la zona donde se encuentran estos menores. También, los concejales de Ortega Smith han solicitado que no se permita a los menas del cercano centro de acogida donde duermen que no se hagan uso indebido de las marquesinas del autobús.
El motivo esgrimido por los dos concejales de Vox que han llevado este tema es que «pasan horas ocupando las marquesinas durante horas sin tomar ningún autobús y molestando a los usuarios de este servicio municipal». Unas molestias que van desde que las personas mayores no puedan sentarse, a las supuestas intimidaciones y coacciones que reciben mujeres y niñas que acuden a a las paradas de autobús.
El centro acoge a más de 100 menores y se señala que la situación es bastante complicada. En teoría estos centros solo deberían acoger a 35 personas y parece estar triplicado el número de personas que pueden acoger. Algo que remarca Vox y que el mes de julio pasado denunció ya el sindicato Comisiones Obreras (CC.OO).
Desde Vox, por este motivo, señalan que el el distrito ve amenazada su seguridad según comerciantes y vecinos de la zona. Desde la formación ultra liberal aseguran que es imposible acercarse a las marquesinas de los autobuses sin sentirse intimidado por 10 o 15 personas de estos centros que las tienen copadas.
La propuesta ha sido echada para atrás por el resto de grupos, aunque desde Vox aseguran que seguirán con su empeño en aumentar la seguridad de los ciudadanos de Hortaleza. Fuentes del Partido Popular comentan en tono jocoso que en su obsesión por mezclar inseguridad e inmigración va a lograr que algún mena sea la nueva Rosa Parks, de momento han fracasado.