La Comunitat Valenciana se enfrenta a un gran desafío tras el devastador paso de la DANA. La recuperación del alcantarillado, la búsqueda de desaparecidos y la gestión de residuos son las prioridades de los equipos de emergencia. Miles de efectivos trabajan sin descanso para restablecer la normalidad y atender a los damnificados, con un enfoque especial en la salud pública y la seguridad ciudadana.
Alcantarillado, residuos y salud pública
La limpieza del alcantarillado es crucial para evitar futuras complicaciones ante las fuertes lluvias previstas. 58 camiones desatascadores trabajan a pleno rendimiento para despejar las vías y minimizar el riesgo de inundaciones. La gestión de residuos y lodos es otra prioridad, con más de 1.032 vehículos, incluyendo grúas, bombas y excavadoras, operados por 520 profesionales, a los que se suman 172 profesionales más con maquinaria pesada, 190 peones, 100 brigadistas de Vaersa y 58 agentes medioambientales.
Esta ingente tarea es fundamental para prevenir problemas de salud pública, por lo que se ha implementado un plan de desinfección para combatir plagas e insectos en todos los municipios afectados. Se recomienda encarecidamente a los ciudadanos que sigan las indicaciones sanitarias, utilizando mascarilla, gafas, calzado adecuado y manga larga durante las tareas de limpieza. Asimismo, es fundamental el uso de agua embotellada tanto para consumo como para cocinar en las zonas afectadas.
Ayudas a damnificados y restricciones al tráfico
Se han habilitado 12 oficinas de información en Albal, Aldaia, Algemesí, Alginet, Benetússer, Carlet, Catarroja, Chiva, Paiporta, Picanya, Turís y Utiel, con horario de 8:30 a 17:30 horas, para gestionar las ayudas urgentes a las personas damnificadas. Se han abierto también nuevas oficinas en Alfafar, Alcudia, Alaquàs, Sedaví y Xirivella para ampliar la cobertura y facilitar el acceso a la información y recursos a los afectados. Para agilizar las labores de los equipos de emergencia, se mantienen las restricciones de circulación hasta el 14 de noviembre en Aldaia, Alaquàs, Picanya, Sedaví, Paiporta, Benetússer, Alfafar, Massanassa, Catarroja, Albal y Beniparrell, facilitando el uso de maquinaria pesada para la limpieza y recuperación de las zonas afectadas.
El puente de la CV-33, una vía esencial para la conexión entre Torrent, Valencia y L’Horta Sud, se ha reabierto al tráfico. Sin embargo, se mantienen las restricciones al tráfico marítimo en el litoral valenciano hasta el 18 de noviembre, con limitaciones de velocidad y prohibición de fondeo para facilitar las labores de búsqueda de los desaparecidos.
El despliegue de efectivos es masivo. Más de 3.100 bomberos de más de 45 organismos, 8.474 efectivos del Ejército, incluyendo 2.103 miembros de la UME, y más de 800 voluntarios de Protección Civil de toda España trabajan incansablemente en las zonas afectadas. En cuanto a la seguridad ciudadana, se cuenta con un despliegue de 9.728 agentes, entre Policía Nacional y Guardia Civil, más de 500 efectivos de las distintas Policías Locales y más de 130 efectivos de la Policía de la Generalitat.
La colaboración y coordinación entre los diferentes organismos y la solidaridad ciudadana son claves para superar esta difícil situación. La prioridad sigue siendo la búsqueda de posibles víctimas en la rambla del Poyo, diversos barrancos, l’Albufera y el mar.