La competitividad es fundamental para cualquier empresa. Dentro de esta lógica, las organizaciones aprovechan todas sus capacidades para sobresalir frente a sus competidores, buscando ventajas que les permitan ofrecer productos de calidad al mejor precio. En esta realidad, el mantenimiento empresarial se convierte en un elemento primordial para asegurar un alto rendimiento y una mayor rentabilidad.
¿Pero qué es el mantenimiento empresarial?
Afortunadamente son muchas las empresas que ya se han dado cuenta de que el mantenimiento no es un costo sino una inversión, resultando esencial para el buen funcionamiento de empresas industriales, ya que impacta directamente en su proceso productivo. Consiste en actividades necesarias para mantener instalaciones, maquinaria y equipos en óptimas condiciones, asegurando la eficiencia y conservación de los activos fijo, desde reparaciones hasta revisiones que garantizan el adecuado estado del sistema productivo.
¿Cuál es su finalidad?
El mantenimiento empresarial, como una estrategia clave en la gestión de cualquier empresa, tiene como objetivo garantizar la continuidad de la producción, la calidad y el buen funcionamiento de los equipos en los procesos industriales. Se trata pues, de un conjunto de acciones que impactan directamente en la cantidad y calidad de la producción, así como en la durabilidad de los equipos involucrados.
En cuanto a sus ventajas
Algunas empresas aún consideran el mantenimiento como secundario, pero los problemas con los equipos afectan tanto a la productividad como a la rentabilidad. El mantenimiento empresarial debe verse como una inversión, ya que ofrece beneficios como la prevención de accidentes, además, incrementa la seguridad para los trabajadores. Por otro lado, contribuye a la disminución de pérdidas por interrupciones, permitiendo un seguimiento adecuado de los equipos. Asimismo, previene daños irreparables y facilita la prolongación de la vida útil de los activos. Finalmente, todo esto se traduce en una reducción de costos y una mejora general en la calidad de las operaciones.
Tipos de mantenimiento
Al diseñar la estrategia de mantenimiento de los activos de una empresa, lo más recomendable es alternar el mantenimiento correctivo con el preventivo. Según la mayoría de los expertos, lo ideal es que el 80% sea preventivo y el 20% correctivo. No obstante, esta proporción puede ajustarse según las necesidades concretas de cada empresa. Veamos a continuación en qué consiste cada uno de ellos.
- Mantenimiento correctivo. El software de mantenimiento correctivo, también conocido en algunas literaturas como mantenimiento reactivo, es el tipo más antiguo y se realiza en momentos críticos para corregir problemas ya manifestados. Actualmente, es el más utilizado en las empresas, ya que se enfoca en solucionar fallas que han causado la detención de equipos.
- Mantenimiento preventivo. Se lleva a cabo en períodos planificados o según necesidad, con el objetivo de reducir fallas, minimizar la degradación de los equipos y mejorar la seguridad de los empleados.
Es importante, mencionar que tanto el mantenimiento preventivo como el correctivo son necesarios en cualquier organización. La adecuada puesta en marcha de ambos influye directamente en la eficiencia de los sistemas productivos y en los costos de mantenimiento.
El momento del mantenimiento empresarial inteligente
En un mercado cada vez más tecnológico, las empresas afrontan la presión de realizar sus procesos de mantenimiento de manera más eficiente, convirtiendo el uso de un ERP de mantenimiento en una herramienta imprescindible. En este sentido, sobresale Cegid Valuekeep, un software GMAO que optimiza la gestión del mantenimiento, permitiendo planificar para reducir costos imprevistos y aumentando la productividad del equipo. Igualmente, podrás compartir sus datos con ERPs, sensores, SCADA y otros sistemas mediante una WebAPI, facilitando la integración total de toda la información de tu negocio.
Como puedes observar, un buen mantenimiento asegura que todo funcione con fluidez. Además, no hay que perder de vista que no se trata solo de una cuestión física, sino también de procesos.
Aquí es donde entra en escena la facturación electrónica online. Este sistema, que cada vez más empresas están adoptando, aparte de agilizar y optimizar los procesos administrativos, también es una herramienta que requiere estar bien cuidada.
Facturación electrónica, un excelente impulso para el sector financiero
Como seguramente sabrás, el Gobierno de España ya tiene preparado un plan para implementar el uso obligatorio de la factura electrónica en todas las relaciones comerciales de empresas y autónomos, lo que implicará supervisión por parte de Hacienda. Esta iniciativa que forma parte de la Ley de Creación y Crecimiento de Empresas, busca facilitar la creación y expansión de empresas, reducir obstáculos regulatorios y combatir la morosidad.
De esta manera, las empresas deberán emplear programas que cumplan con requisitos específicos para el intercambio automático de facturas, garantizando la seguridad y trazabilidad de la información. De ahí la necesidad de implementar las soluciones de Cegid para facturación electrónica, con las que podrás estar seguro de cumplir con las normativas actuales.
Con los numerosos cambios en facturación electrónica que están por llegar debido a la Ley Antifraude y la Ley Crea y Crece, es imprescindible que las organizaciones cuenten con un aliado tecnológico que les facilite la adaptación a estas nuevas normativas. Confía en las soluciones de Cegid para cumplir con los requerimientos, permitiéndote enfocarte en las tareas de valor de tu negocio sin preocuparte por la implementación de la facturación electrónica.
