viernes, 29 noviembre 2024

La entereza de la Reina Letizia y el Rey Felipe VI ante las críticas y lluvia de barro en Paiporta

La Reina Letizia y el Rey Felipe VI han mantenido una compostura, humildad y empatía ante las críticas, abucheos y lluvia de barro por parte de algunos vechinos de la localidad de Paiporta (Valencia), una de las zonas más afectadas por la DANA y la devastadora riada provocada por el desbordamiento de los barrancos de la cuenca del Júcar y del Turia. «No teníais que estar hoy aquí», la ha espetado una ciudadana anónima a la Reina Letizia, cuyo gesto y lejos de marcharse y pedir el auxilio a los escoltas de la Casa Real, reconforta en unos momentos tan duros.

La reina Letizia se ha dirigido a ella de un modo muy tranquilo, empático e incluso con humildad. La mujer, visible y comprensiblemente tensa y desbordada por una situación dramática, agitó sus brazos para reiterar: «No era el día de venir aquí». La reina Letizia se justificó para tratar de calmar a la joven, que se aferraba a sus palabras. En ese momento, la reina le coge por los brazos, para después juntar sus manos y abrazarlas, sin mostrar fuerza alguna, para finalmente tranquilizarla con la voz y el tono. La joven, sin quererlo, reduce las críticas y reitera: «No era el día de venir aquí».

Detrás de la Reina Letizia se encontraba el Rey Felipe VI, que se acerca a hablar con el grupo de voluntarios y vecinos. Es en ese momento cuando la Letizia muestra una cara de desolación, preocupación, pero sin resignarse. Apoyada en un coche, pensativa, con la mirada cabizbaja y la cara bañada en barro, la reina muestra una gran humanidad en ese momento, mientras Felipe VI trata de calmar a la misma joven, con unas manos que piden calma. La joven le interrumpe y pasa a un lenguaje más político: «No queremos dimisión, queremos despido directo».

rey felipe vi Moncloa

«Tiene que irse este Gobierno», exige un ciudadano anónimo, un comentario que hace girarse a la Reina Letizia para mirar quién habla, al tiempo que capta también la atención del Rey Felipe VI. «://www.moncloa.com/2024/11/03/ayuntamientos-dana-alerta-2991283/»>Si no sale el Gobierno a la calle, el Gobierno no se irá», reitera ante el Rey Felipe VI, que rechaza con sus palabras las declaraciones. «Todo lo que percibís (…) claro que era necesario avisar», explica. «Esto supera todo lo imaginable», apunta el monarca.

«Deberíamos estar más preparados. Un país como España, más preparado para esto», se refiere el anónimo vecino o voluntario del pueblo de Paiporta. «Fiestas no nos faltan, fiestas no nos faltan», denuncia. «Hay que entender que estáis bloqueando el movimiento de todos los camiones», le increpa un tercero ante la comitiva que ha llevado a Paiporta a los Reyes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y Carlos Mazón, presidente de Valencia.

PEDRO SÁNCHEZ, A LA CARRERA, MIENTRAS MAZÓN ESCOLTA A LOS REYES

Los abucheos han sido de tal calibre que algunos han arrojado piedras y barro a las autoridades. Pedro Sánchez ha salido en coche oficial de la comitiva, mientras Mazón se ha quedado escoltando a los Reyes en uno de los momentos más duros de la historia de España.

Al iniciar un recorrido por las calles de Paiporta, donde ya había gente gritando y lanzando objetos, la comitiva se ha roto. En la cabeza han quedado el monarca y el presidente de la Generalitat, separados del resto, mientras que se ha visto cómo los servicios de seguridad de Sánchez lo protegían con un paraguas y lo retiraban. Se ha visto que alguien lanzaba un palo hacia el presidente del Gobierno, que no ha continuado con la visita.

Efectivos de seguridad han intentado salvaguardar al rey con un paraguas en varios momentos, pero él se lo ha apartado. Además, agentes han tratado de abrir paso al monarca para alejarle de la multitud, aunque Felipe VI se ha mantenido para conversar con diversas personas que le rodeaban, seguido de Mazón.

«ESTAMOS MUERTOS YA»

La reina Letizia, que ha acabado igualmente con barro en la cara, se ha quedado en otro grupo separada del rey y se le ha visto hablando con algunos afectados, e incluso abrazada a varias mujeres, con cara compungida.

«Estamos muertos ya»; «la gente muriéndose y vosotros venís ahora a qué»; «a ti no te hace falta agua, no te falta nada», se ha escuchado a vecinos reprocharle a la monarca según imágenes difundidas.