De todos es conocido la mala relación entre la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Rivas, único consistorio de la región de Madrid en manos de Izquierda Unida apoyado por el resto de partidos de progresista del municipio. El último de los temas por el que han colisionado ha sido la vivienda y la petición del municipio de ser declarado zona tensionada por parte de la Comunidad de Madrid, algo que el ejecutivo de Ayuso ha negado.
“Rivas es una referencia en materia de vivienda pública. Con esta declaración, buscamos proteger aún más el derecho de la ciudadanía ripense a vivir en nuestra ciudad”, declaro la alcaldesa de la ciudad, Aída Castillejo.
Para reafirmar estas declaraciones desde la alcaldía de Rivas se ha realizado un informe técnico emitido por la Empresa Municipal de Vivienda de Rivas (EMR). Ese informe señala que la ciudad cumple con los requisitos establecidos en la legislación, que busca garantizar el derecho a la vivienda de toda la ciudadanía.
Hay que señalar que la declaración de zona residencial tensionada es una herramienta de la Ley por el Derecho a la Vivienda, que solo pueden efectuar las comunidades autónomas y que permite a los ayuntamientos aplicar medidas específicas para contener el aumento de los precios del alquiler y limitar las rentas de los grandes tenedores.
Con esa petición desde el Ayuntamiento ripense también se solicitó la convocatoria de nuevas ayudas para el incremento del parque público de viviendas en alquiler. Recordando que la Empresa Municipal de Vivienda de Rivas es la empresa pública de la Comunidad de Madrid con mayor número de viviendas en su parque propio de alquiler en términos relativos.
Además, el ejecutivo municipal dirigido por Castillejo remarca que este plan específico de vivienda se solicita que las administraciones competentes, tanto la Comunidad de Madrid como al Gobierno de España, acompañen a los ayuntamientos con financiación para el incremento del parque público de viviendas. Todo ha sido papel mojado y las peticiones no se van a cumplir por parte de la Comunidad.
RESPUESTA DEL PP LOCAL
El PP de Rivas Vaciamadrid ha funcionado como «brazo armado» de la Comunidad y se ha puesto en plan franco tirador con la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV) por su continua falta de recursos. Y se muestra contrariado por la intención de lanzar una ampliación de capital de dos millones de euros.
Una iniciativa que llega al pleno municipal de Rivas Vaciamadrid y que según el PP no va a solucionar la perdidas millonarias que tiene la EMV de Rivas, además los problemas que tiene con varios acreedores que reclaman su deuda, como es el caso del Gobierno regional.
El PP comenta que ese descontrol económico se puede ver desde la propia memoria de cuentas de la empresa, de titularidad pública al 100%, en donde se aprecian movimientos no registrados ni motivados totalmente dese el Ayuntamiento. Una guerra que viene de lejos y que ya des el año pasado denunciaron que los convenios firmados por la alcaldesa de IU, con una asociación afín ideológicamente, ya que su presidente formaba parte de las listas electorales de su coalición en los comicios municipales del 28 de mayo.
OTRAS ACUSACIONES
Estas acusaciones generales no vienen solas y van acompañadas de otras más particulares que desde el entorno a la oposición comentan. como es el caso de los alquileres sociales, que según estas fuentes, no se revisan los requisitos de acceso cada cierto tiempo. «Se dan casos de dar pisos sociales a rentas bajas que con la evolución del tiempo esos beneficiarios han pasado a cobrar buenos sueldos y siguen pagando un alquiler social, que le quita acceso a otras personas en situación de vulnerabilidad», señalan estas fuentes de la oposición.
Otro tema a destacar es el registro, es decir el número en el que los solicitantes van en la lista, es oculto y no público. Algo que resta credibilidad al proceso de acceso a la vivienda pública. Además, también se remarca que desde hace 10 años a penas se hacen promociones para facilitar el acceso, es decir, en una década a penas se ha construido vivienda pública desde la EMV de Rivas, según comentan las mismas fuentes.
Esto último ha sido contestado por parte del ejecutivo municipal señalando la intención de construir 83 nuevos pisos de oferta pública para atacar a la demanda de vivienda que existe en Rivas. La oposición piensa que desde el propio Ayuntamiento son recelosos a la entrada de nueva población en la ciudad que pueda desbaratar los resultados electorales.
Estas denuncias contra la política y el hacer de la EMV también incluyen denuncias vecinales por desperfectos no arreglados. Una denuncia y multa por falta de accesibilidad para personas con discapacidad. La guerra de la vivienda sigue muy viva en Rivas, como en todo Madrid, con instituciones con pocas ganas de llegar a acuerdos que faciliten la vida de los ciudadanos.