Las conversaciones del Caso Koldo han devuelto a la actualidad uno de los asuntos que más espacio ocupó en la prensa en su momento: el conocido como ‘Decylgate’. En su momento, el asunto recayó en el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid que preside el juez Antonio Serrano-Arnal.
Algunas de las informaciones que hace cuatro años estaban en el limbo de los rumores ahora han tomado cuerpo de veracidad gracias a algunos datos desvelados por algunos miembros de la presunta trama de corrupción alrededor de Koldo y Aldama.
No sería este el primer caso con relevancia mediática que instruyera Serrano-Arnal. En su día se hizo cargo de la instrucción de la Operación Puerto sobre el dopaje en el deporte. Su actuación fue muy contestada al sobreseer la causa ya que, después, la Audiencia Provincial le hizo reabrirla.
También se encargó de condenar al actual magistrado del Tribunal Constitucional Enrique López al pago de una multa de 1.440 euros y a la retirada del carné de conducir durante 8 meses tras haber dado positivo en un control de alcoholemia.
Eso sí, el cénit de su popularidad como ‘juez estrella’ la alcanzó como instructor del proceso contra el expresidente del FMI Rodrigo Rato.
UNA ZARINA NACIDA EN MADRID
Si su trayectoria en lo juzgados le ha hecho protagonista de las crónicas tribunales su vida sentimental, inevitablemente, también ha captado el interés de la prensa del corazón. El juez Serrano-Arnal vive desde 2020 un romance con un destacado miembro de la realeza internacional.
Se trata de María Vladimirovna Romanova, la Gran Duquesa María de Rusia. Para los legitimistas rusos, si a la extinta Unión Soviética le hubiese seguido una reinstauración de la monarquía zarista esta madrileña sería María I, o lo que es lo mismo la Zarina de Todas las Rusias. Pero ¿Quién es realmente la pareja de Serrano-Arnal?
María nació en Madrid el 23 de diciembre de 1953 y se crio un señorial edificio del barrio de Salamanca donde tuvo como vecinos a los embajadores de Uruguay (padres de la escritora de Carmen Posadas) y el temido ministro de Gobernación franquista Camilo Alonso Vega.
Los derechos sucesorios al trono ruso le vienen por sus abuelos paternos paternos Cirilo Vladimirovich y la princesa Victoria Melita de Sajonia eran primos, de Alejandro II de Rusia, el antepenúltimo emperador ruso. Extinguida la línea oficial, al asesinar los bolcheviques a la familia imperial, la línea continúa hasta llegar a María de Rusia.
La pareja del juez es por línea materna, además, descendiente de los antiguos reyes de Georgia que perdieron su corona con la anexión de sus territorios al imperio ruso a principios del siglo XIX.
El exotismo de su figura le hizo muy atractiva para la prensa española de los años 70. Además, gozaba de cierta influencia en el protocolo de la corte franquista. El gobierno español no reconocía a la Unión Soviética comunista y para el dictador español tener en suelo patrio a la ‘verdadera’ líder rusa era un lujo.
Por ello su boda a principios de 1976 acaparó los titulares de la prensa nacional, portada de ¡Hola! incluida. Se unió en la iglesia ortodoxa de la calle Nicaragua a otro monarca depuesto Francisco Guillermo de Prusia. A la ceremonia asistieron los recién llegados al trono Juan Carlos y Sofía.
En la nómina de invitados un buen nutrido grupo de reyes destronados que disfrutaban de su exilio en Madrid como Simeón de Bulgaria o Leka de Albania. También estuvieron en la lista de invitados los entonces aún casados duques de Cádiz, Carmen Martínez-Bordiú y Alfonso de Borbón-Dampierre y un moribundo Humberto de Italia.
El matrimonio entre María y su príncipe duró poco. Nueve años después se divorciaron. Eso sí, les dio tiempo a tener un heredero: Jorge, hoy por hoy el último de los Romanov. Desde su divorcio María ha seguido residiendo en Madrid, pero con la caída del régimen soviético, ha visitado en múltiples ocasiones Rusia. Su primera vez en 1992 fue ampliamente recogida por los medios de comunicación.
¿LA INFANTA SOFÍA ZARINA DE RUSIA?
Para los legitimistas de la corona, María se ha convertido en la heredera perfecta. Un vínculo con la historia de la dinastía que portó la corona zarista muy unida a ciertos grupos políticos dentro del país. Parece improbable que la monarquía se restaura en Rusia, pero corrientes ideológicas y nostálgicas crecen el gigantesco país.
Aunque para la mayoría de los monárquicos rusos María representa la herencia de los últimos zares, hay sectores que opinan que la tesis histórica que la representa como receptora de esos derechos dinásticos no es válida y que sería otro nombre quien debería ocupar su lugar: la Infanta Sofía de España.
Sofía de Borbón, y biznieta de los zares y del Káiser alemán Guillermo, nieta e hija de los Reyes de España, sería para algunos monárquicos la única heredera legal en todo caso de la monarquía rusa, si hubiera algo que heredar. Sin embargo, esta posibilidad no se contempla en la Zarzuela, ni hablan de ella. No sólo por remota, que también, sino por la posición que ocupa en la línea de sucesión a un trono existente, el español. Por su parte, María de Rusia ejerce de Zarina en el exilio.