La Audiencia Nacional juzgará desde este lunes a la etarra Ainhoa García Montero, que se enfrenta a una petición de 30 años y seis meses de cárcel como presunta autora del asesinato del empresario vasco José Maria Korta en agosto de 2000 mediante la detonación de un coche bomba.
En su escrito de acusación, recogido por Europa Press, el Ministerio Público pide que sea condenada a 28 años de cárcel por un delito de homicidio terrorista con inhabilitación absoluta por igual período y a dos años y seis meses de prisión por el delito de falsificación de documento. Además, insta a que indemnice a la mujer e hijos de Korta con la cantidad de 300.000 euros, así como a su compañía.
La Fiscalía sostiene que García Montero forma parte del comando Buruntza/Zartako de la organización terrorista ETA. Así, y «en unión de otras personas, resolvió dar muerte a José María Korta, a la sazón propietario de la empresa Korta, ubicada en el polígono industrial Gorostiaga de la localidad guipuzcoana de Zumaia».
Después de que a García Montero le fuese facilitado un coche que fue robado previamente por miembros del comando Erezuma, ésta habría sustituido «las matrículas originales por otras confeccionadas con letras y números de material plástico adherido sobre placas en blanco y colocó en dicho turismo un artefacto compuesto por entre 15 a 20 kilos de gelatina explosiva o dinamita tipo goma, que ubicaron dentro de una tartera en el maletero, y un sistema de ignición eléctrica, que dispusieron en la guantera conectado con la antena del vehículo».
El 8 de agosto del año 2000, la acusada y otro etarra ya condenado, según la Fiscalía, trasladaron el coche al aparcamiento situado frente a la fachada principal de la empresa Korta, en concreto al lado del vehículo utilizado por el empresario.
«Sobre las 12.15 horas y cuando José María Korta salió del edificio de la empresa y subió al Audi, la procesada y otra persona ya condenada por estos hechos, empleando un radio mando y desde la carretera GI-3760, obrando con perfecta visión sobre el aparcamiento, hicieron detonar el explosivo que alcanzó a su víctima, causando su fallecimiento escaso minutos más tarde», relata el escrito del fiscal.