Desde que finalizara el estado de alarma, nos hemos ido acostumbrando a la ya más que acogida «nueva normalidad». Uno de los elementos que ya siempre van con nosotros es la mascarilla. De hecho, en prácticamente toda España, su uso es obligatorio aunque podamos guardar la distancia de seguridad marcada por las autoridades sanitarias.
Es por esto que se han generalizado de forma que ya nunca salimos a la calle sin ellas y que, en el caso de que se nos olviden, no dudamos en volver a casa a cogerlas. En el nuestro y en todos los países del mundo el objetivo es el mismo: no permitir que se siga propagando el contagio del coronavirus.
Las higiénicas son las más extendidas, pero también las que hacemos nosotros mismos. Por eso, descubre cómo saber si tu mascarilla casera es 100% segura.
1Muchas mascarillas y un fin: proteger al resto
Las mascarillas que más usamos de forma normal son las higiénicas. Su precio no es desorbitado pero, aún así, para una familia con más de dos miembros puede suponer un golpe importante en su presupuesto mensual. Por eso, muchas personas optan por realizar su propia mascarilla en casa o adquirir una de tela que se pueda lavar de forma frecuente. Pero, ¿son efectivas?
Tanto las higiénicas como las confeccionadas tienen el mismo objetivo: proteger a los demás. Sin embargo, no todas lo consiguen de la misma forma. Para ayudarnos a saber si la nuestra sí lo hace, el profesor Simon Kolstoe, de la Universidad de Portsmouth, ha realizado un experimento por su cuenta en el que descubre uno de los métodos con el que lo podemos comprobar.
Sus resultados han sido publicados en un artículo recogido en Science Alert. En él, el profesor nos comienza explicando lo más fácil: cómo es el tamaño del virus al que nos estamos enfrentando. Después de dar unas nociones básicas que, a día de hoy, ya deberíamos conocer sobre el provocador de la COVID-19, procede a explicarnos paso a paso y de forma muy sencilla cómo podemos hacer la comprobación nosotros mismos en la comodidad de nuestra casa.