Jordania es un país que no solo cautiva por su belleza natural y su rica historia, sino también por sus impresionantes construcciones antiguas. Uno de sus tesoros más impresionantes es el puente de Ad Deir, una maravilla arquitectónica que se remonta a 1300 a.C. Este puente, construido por los nabateos, se considera el más antiguo de piedra que se conserva en el mundo y es un testimonio del ingenio y la habilidad de esta antigua civilización.
1El puente de Ad Deir en Jordania demuestra las capacidades de los nabateos en aquella época
Los nabateos, conocidos por su destreza en la construcción y el comercio, erigieron este puente en un momento en que la ingeniería civil comenzaba a nacer. El puente de Ad Deir conecta las antiguas rutas comerciales que una vez atravesaron la región, permitiendo el transporte de mercancías entre las ciudades. Este puente no solo cumplía una función práctica, sino que también simbolizaba la importancia de los nabateos en el comercio regional.
Una de las características más impresionantes del puente de Ad Deir es su diseño. Construido con grandes bloques de piedra, este puente muestra la maestría de los nabateos en el uso de materiales locales. La estructura ha resistido el paso del tiempo y las inclemencias del clima, lo que la convierte en un atractivo turístico y un lugar de interés para arqueólogos e historiadores. Cada piedra cuenta una historia y refleja la habilidad de sus constructores.