Ayer viernes los amoríos de convivencia entre el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y el rey de Marruecos, Mohamed VI, sufrieron un duro varapalo por parte del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). El órgano de justicia europeo declaró ilegal los acuerdos de agricultura y pesca entre Marruecos y la Unión Europea (UE). Unos acuerdos en los España intercedió de manera continua a favor del reino alauí, cediendo de esta forma a los chantajes continuos en materia de inmigración que desde el país africano realizan a España.
La sentencia ha sido demoledora y un contratiempo para Marruecos que sonroja al gobierno español que se jacta en numerosas ocasiones de la defensa de los derechos humanos y en el caso del pueblo saharaui los ha olvidado desde el 2021. El TJUE tumba los acuerdos comerciales de agricultura y pesca entre la UE y el Reino de Marruecos por considerar que ambos se celebraron sin el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental, algo que desde el ejecutivo español obviaron a favor de la defensa de los intereses marroquíes.
LA SENTENCIA
La sentencia ha sido bastante clara con el asunto especialmente en el expolio de los caladeros de pesca del Sáhara Occidental por parte de los barcos de la UE que pagaban un canon a Marruecos que ejercía una soberanía sobre las aguas no reconocida por la ONU. En este sentido, el TJUE ha desestimado los recursos del Consejo y la Comisión, en línea con la sentencia del Tribunal General de la UE de 2021 y con las conclusiones de la Abogada General Tamara Cápeta.
Cabe destacar en esta sentencia que la aplicación de este protocolo expiró el pasado 17 de julio de 2023, lo que supuso la suspensión de la actividad, algo que afecta especialmente a España, ya que 92 de las 138 licencias que faenan en la zona corresponden a su pabellón, en concreto, a la flotas andaluza, gallega y canaria, de las que se espera una queja hacía el gobierno español reclamando daños en su actividad pesquera.
En base a los mismos principios, el Tribunal de Justicia se ha pronunciado también sobre una cuestión prejudicial francesa acerca de la problemática del origen de los melones y tomates del Sáhara Occidental. Y dicta que su etiquetado debe indicar únicamente el Sáhara Occidental como país de origen de estos productos, excluyendo cualquier referencia a Marruecos, para evitar inducir a error al consumidor sobre su verdadero origen.
BIEN RECIBIDA POR EL FRENTE POLISARIO Y El CAMPO ESPAÑOL
La sentencia ha sido bien recibida por el Frente Polisario puesto que esa organización fue quien presentó una serie de recursos de anulación para impugnar ambos acuerdos, ya que se habían celebrado sin el consentimiento del pueblo del Sáhara Occidental. Cabe recordar que la sentencia también sirve para remarcar más al Frente Polisario como interlocutor válido del pueblo saharaui ante la UE.
Para finalizar, el fallo del alto tribunal europeo recuerda que se reconoce que estos acuerdos no crean obligaciones jurídicas que recaigan sobre el pueblo del Sáhara Occidental, pero tampoco le confieren ningún derecho ni ventaja sobre la explotación de sus recursos, por lo que el consentimiento no puede presumirse, sumado a que el Frente Polisario, en calidad de representante legítimo de dicho pueblo, se opone a los acuerdos, lo que a juicio del TJUE basta también para cuestionar la existencia del consentimiento del pueblo saharaui a dicho expolio.
El responsable estatal de Frutas y Hortalizas de COAG, Andrés Góngora, ha declarado que «la aplicación de la sentencia debe ser inmediata, sin periodos de gracia. Los agricultores europeos no hemos tenido ese periodo de gracia y sufrimos la competencia desleal de esos acuerdos». Una idea muy extendida entre el sector agrario español.
TRIUNFO DE LA RESISTENCIA SAHARAUI CONTRA MARRUECOS Y PEDRO SÁNCHEZ
Además, el Frente Polisario ha remarcado con insistencia que esta sentencia es «triunfo de la resistencia» y un hecho que atiende a sus principales reivindicaciones, que no es otra cualquier pacto de este tipo requiere del «consentimiento» de la población saharaui y que se debe respetar el derecho de autodeterminación.
El representante del Polisario en España, Abdula Arabi, ha recalcado que el Sáhara Occidental debe entenderse como «un territorio distinto» a Marruecos, de tal manera que Rabat no puede negociar en su nombre ningún acuerdo con terceros. Aceptar al Gobierno marroquí como representante de la población saharaui, según Arabi, implica «reconocer la ocupación».
Ahora, espera que los países europeos sean «consecuentes» y acaten la sentencia del TJUE. En este sentido, ha señalado que el Polisario siempre ha estado «a disposición» de las empresas y de los sectores agrícola y pesquero para que estos puedan beneficiarse de los recursos del Sáhara Occidental pero «respetando el Derecho Internacional«.
Arabi ha apuntado que cualquier futuro diálogo debe por tanto incluir al Frente Polisario y ha recordado que Marruecos y la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) ya se sientan en foros como la Unión Africana «como dos Estados» diferenciados, sugiriendo que como tal deberían ser entendidos también desde la Unión Europea a pesar de los intentos del PSOE y Francia por blanquear la ocupación marroquí.
TESH SIDI LA MÁS CONTENTA ENTRE LOS ALIADOS DE SÁNCHEZ EN EL GOBIERNO
Dentro de los socios del gobierno de Sánchez esta decisión también ha sido bien recibida, especialmente por la parlamentaria saharaui Tesh Sidi (Sumar) que señaló que era un día histórico y felicitó al Polisario en sus redes sociales «por su legítima defensa de sus recursos naturales». «La UE y España llevan años expoliando, a través de Marruecos, los recursos pesqueros y agrícolas del pueblo saharaui», añadió la parlamentaria.
En otro orden de cosas, pero siguiendo con la problemática del Sáhara Occidental, Tesh Sidi también atacó la política de devoluciones de Marlasca de los 16 solicitantes saharauis de asilo que estaban en Barajas. La parlamentaria también comentó que el ministro de Interior «hace la política que no enfada a Marruecos» en el mismo día de la sentencia.
El gobierno mediante José Manuel Albares, ministro de Exteriores, en un escueto comunicado se ha limitado a reconocer que acatará la sentencia de la justicia europea. No han entrado a explicar el porqué del apoyo a Marruecos en este tema.
