El partido de Santiago Abascal ha perdido fuelle en los feudos de sus primeras victorias. El fenómeno de Vox nació en lugares como El Ejido, Torre Pacheco, o los barrios ricos de las grandes ciudades. En muchos de ellos el apoyo ciudadano se ha reducido a la mitad.
Está por ver si se ha tratado de un problema con los candidatos presentados o es el resultado de una tendencia, pero a Vox le ha cambiado el viento electoral en los lugares en los que cosechó sus primeras victorias. Tras el boom de las elecciones andaluzas del pasado mes de diciembre, en las generales de abril consiguió afianzarse y mejorar sus resultados, pero ahora todo es diferente.
Valga como ejemplo el municipio almeriense de Adra, donde Vox obtuvo en las generales del pasado mes de abril el 24% de los votos, mientras que en las municipales sólo roza el 10%. El caladero de votos de este partido en las localidades agrícolas de Almería y Murcia flaquea.
Así, por ejemplo, los llamativos resultados que cosechó Vox en El Ejido (Almería) en las elecciones andaluzas, hicieron de este municipio del mar de plástico de los invernaderos el principal escaparate del fenómeno de su irrupción en el escenario político.
De hecho, Vox consiguió mejorar los resultados de las andaluzas en las generales del pasado mes de abril en esta localidad. Aunque algunos análisis asociaron la llegada de Vox a la alta abstención experimentada en las andaluzas, los hechos desmintieron esta tesis.
En las generales en El Ejido, Vox consiguió casi 2.000 votos más y con ello alcanzó los 9.272, lo que significa un 30% de los sufragios. Sin embargo, en las municipales del pasado fin de semana el partido de Abascal sólo consiguió convencer a 6.406 vecinos, lo que le supone caer hasta el 24% de los sufragios, seis puntos menos.
Algeciras se convirtió en uno de los ejemplos de crecimiento de Vox en zonas deprimidas económicamente y, en este caso, con problemas de narcotráfico. En las elecciones andaluzas de diciembre votaron a esta formación política 8.289 personas, el 20%.
En las generales del pasado mes de abril, se mantuvo en el mismo porcentaje, pero obtuvo 2.000 votos más gracias al crecimiento de la participación, lo que desmentía que el resultado de esta formación era bueno gracias a la abstención. Finalmente, en las elecciones municipales, Vox sólo consigue retener a 3.555 votantes; es decir, el 8% de los votos, menos de la mitad que en las andaluzas.
PINCHAZO TOTAL DE VOX EN LA LÍNEA
La otra ciudad del Campo de Gibraltar, con los mismos problemas que Algeciras, más acentuados en el caso del narcotráfico, es La Línea. Aquí, Vox ha pasado del 15% al 3% en sólo seis meses.
Vox apareció en diciembre, en las elecciones andaluzas, con 2.786 votos y el 14,7%. El partido de Abascal mejoró sus resultados en las generales, donde alcanzó el 15%, correspondientes a 4.212 votos. Ahora, en las municipales, el voto en esta ciudad ha tenido un cariz especialmente localista, ya que La Línea 100×100 ha obtenido el 67,5% de los votos y Vox prácticamente desaparece, con sólo 731 votos que suponen el 3,1%.
La localidad murciana de Torre Pacheco se destapó en las elecciones generales como uno de los municipios que confirmaba en estos comicios que la aparición de Vox en el escenario político no se iba a limitar a Andalucía. Fue uno de los ejemplos en los que el partido de Santiago Abascal conseguía convertirse en la fuerza más votada. En este municipio, uno de los de mayor renta de Murcia, obtuvo el 25% de los votos. Ahora, en las municipales, se ha quedado en el 13%. En votos eso supone pasar de 3.542 a 1.634, algo menos de la mitad.
En otros lugares del sureste de España con las mismas características, la evolución de Vox ha sido parecida. Dentro de Almería, en Roquetas, por ejemplo, han pasado del 23,4% al 11,9%. En Adra ha sido aún peor, al caer del 24% al 9,7%.
En cuanto a las grandes ciudades andaluzas, la caída de Vox ha sido muy importante en Málaga. Aquí contaba en las generales con 41.326 votos (el 13,3%) mientras que en las municipales sólo ha cosechado 10.376. Con ese 4,3% no consigue ni siquiera un concejal en este ayuntamiento.
En Sevilla, la caída en porcentaje ha sido del 12% al 8%, y en distritos ricos como el de Los Remedios, la caída ha sido del 23,4% al 14,3%, de 3.923 a 1.994 votos. Otros municipios andaluces donde los porcentajes de Vox destacaban sobre la media nacional fueron el de Benahavís (Málaga) donde los votos han pasado del 23,4% en las generales al 8,8% en las municipales.
Los distritos y municipios más ricos de Madrid han alimentado las urnas con Vox. En el barrio de Salamanca de la capital, uno de los más conservadores y de más alto nivel de renta, los partidarios del candidato de Vox a la alcaldía, Ortega Smith, han pasado de 16.468 a 8.497.
En Pozuelo de Alarcón baja del 19,8% de las generales al 13,7%. La caída ha sido también estrepitosa en Boadilla del Monte, donde ha pasado de obtener 6.175 a sólo 1.980 votos. Finalmente, si el feudo izquierdista de Marinaleda, en Sevilla, fue noticia por la aparición de 44 votantes de Vox en las andaluzas, que en las generales se convirtieron en 84, en las municipales del pasado fin de semana se quedaron en… cero.