La Economía Española se encuentra en un momento de sólida recuperación, según las nuevas previsiones actualizadas por el Gobierno. Estos datos reflejan un panorama macroeconómico más favorable, con un crecimiento más fuerte, equilibrado y responsable en los próximos años. Las proyecciones señalan que España crecerá a un ritmo más acelerado que sus principales socios europeos, lo cual contribuirá a ampliar aún más la brecha de desarrollo entre la economía española y el resto de las mayores economías del continente.
Estas estimaciones revisadas al alza responden, en parte, a la reciente actualización realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en el período 2021-2023. Dicha revisión ha supuesto un incremento adicional del crecimiento acumulado de 1,1 puntos porcentuales entre 2019 y 2023, lo que se traduce en un aumento de más de 36.400 millones de euros del PIB nominal.
El Consumo Privado y la Inversión, Motores del Crecimiento
Según los datos económicos, el consumo privado será uno de los principales impulsores del crecimiento, con avances del entorno del 2% a lo largo de todo el período proyectado, gracias al «buen comportamiento» del mercado laboral. Se estima que el consumo privado aumentará un 2,2% este año, un 2,1% en 2025 y un 2% en 2026.
Por su parte, el gasto público también experimentará un crecimiento, pero a un ritmo más moderado que en 2023, con incrementos del 1,8% este año y del 1,6% tanto en 2025 como en 2026.
Asimismo, el Gobierno ha revisado al alza el crecimiento de la inversión, como reflejo del impulso y aportación positiva del Plan de Recuperación. Así, estima ahora que la inversión aumentará un 3,3% en 2024, un 5,8% en 2025 y un 4,9% en 2026.
Empleo y Reducción del Desempleo
Según las proyecciones, se crearán alrededor de 500.000 empleos al año, lo que permitirá superar los 22 millones de ocupados en 2025. Además, la tasa de paro seguirá disminuyendo, situándose en el 11,2% en 2024, el 10,2% en 2025 y el 9,7% en 2026, tasas muy similares a las comunicadas anteriormente.
Este crecimiento del empleo vendrá acompañado de una mejora de la productividad por hora todos los años, y del aumento de la remuneración por asalariado, que crecerá por encima de la inflación.
Sector Exterior y Demanda Interna
Si bien el sector exterior mantendrá un tono positivo por el dinamismo de las exportaciones, a partir de 2025 comenzará a restar al crecimiento del PIB. Las exportaciones avanzarán un 4,2% en 2024, pero moderarán su ritmo de crecimiento hasta el 2,4% en 2025 y hasta el 2,3% en 2026. Las importaciones, por su parte, se incrementarán un 2,6% este año y acelerarán su crecimiento al 3,6% en 2025, mientras que en 2026 subirán algo menos, un 3,1%.
En este contexto, la demanda nacional aportará dos puntos al crecimiento del PIB de 2024, mientras que la externa contribuirá con siete décimas. En el caso de 2025, todo el crecimiento se apoyará en la demanda interna, pues el sector exterior restará tres décimas al PIB, y lo mismo en 2026, cuando la demanda externa tendrá una contribución negativa de dos décimas.
En resumen, las nuevas previsiones económicas para España hasta 2026 reflejan un panorama de crecimiento sostenido y responsable, impulsado principalmente por el consumo privado y la inversión, con una evolución positiva del empleo y una reducción gradual del desempleo. Si bien el sector exterior comenzará a restar al PIB a partir de 2025, la demanda interna seguirá siendo el principal motor de la Economía Española en los próximos años.
