La Junta de Gobierno, presidida por el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, ha aprobado nuevos beneficios fiscales para contribuir a paliar los efectos negativos de la pandemia, como la reducción en un cien por cien en la tasa por utilización privativa o aprovechamiento especial del dominio público local a los mercadillos, incluido el Rastro, y un 25 por ciento en la tasa de terrazas de hostelería.
El mismo 25 por ciento será aplicable al ejercicio de actividades comerciales, industriales y recreativas (feriantes) y distribución gratuita de prensa, lo que se une a la devolución de otro 25 por ciento de la tasa por el tiempo que no han podido ejercer la actividad por el estado de alarma. Eso supone que el beneficio para estos colectivos será del 50 por ciento de la cuota anual.
Estas reducciones se van a aplicar de oficio, sin necesidad de su solicitud por parte de los sujetos pasivos afectados. Estas medidas representan una ayuda directa a los empresarios de los sectores beneficiados por las mismas de alrededor de 3,5 millones de euros. El Gobierno municipal continúa así la senda iniciada con las bonificaciones introducidas en el IBI y en el IAE para impulsar la actividad económica.
Tras la aprobación en Junta de Gobierno se prevé abrir un proceso de información pública de 30 días para su elevación posterior al Pleno, en septiembre, y para que su concesión se lleve a cabo antes de final de año.