La gestación subrogada, comúnmente conocida como «vientre de alquiler», es un tema complejo y delicado que ha generado numerosos debates y controversias en todo el mundo. En España, esta práctica no está permitida, pero eso no significa que los padres de niños nacidos en el extranjero por este método no puedan modificar el Registro Civil para proteger la intimidad de sus hijos.
Recientemente, el Tribunal Supremo (TS) ha emitido una sentencia que autoriza a los padres de niños nacidos en el extranjero por gestación subrogada a cambiar el lugar de nacimiento en el Registro Civil, trasladándolo del Registro Central al Registro Civil de su domicilio. Esta decisión tiene importantes implicaciones en la protección de los derechos y la privacidad de los menores involucrados en estos casos.
El Derecho a la Intimidad del Menor
El Supremo ha considerado que la aplicación analógica de los preceptos de la Ley del Registro Civil que permiten el cambio de lugar de nacimiento en casos de adopción internacional es acorde con las exigencias de varios artículos de la Constitución. Esto incluye el derecho a la intimidad personal y familiar del menor, la no discriminación por razón de nacimiento y la protección de los hijos por parte de los poderes públicos.
La publicidad registral de un lugar de nacimiento en el extranjero que revele la existencia de una adopción o las circunstancias relativas al origen del menor, como en el caso de la gestación subrogada, vulneraría el derecho a la intimidad del menor. Esto supondría una discriminación respecto de otras filiaciones que no se encuentra justificada.
La Protección de la Dignidad Humana
El magistrado Rafael Sarazá, ponente de la sentencia, ha sido reconocido por sus posturas críticas hacia la gestación subrogada. En una sentencia previa, Sarazá consideraba que las limitaciones impuestas a la gestante, como la posibilidad de decidir sobre su vida en caso de enfermedad o lesión, son incompatibles con la dignidad humana.
Esta posición refleja la importancia de salvaguardar los derechos y la dignidad de todas las partes involucradas en la gestación subrogada, incluyendo a los padres, a los menores y, especialmente, a las madres gestantes.
En conclusión, la decisión del Tribunal Supremo de autorizar el cambio de lugar de nacimiento en el Registro Civil para proteger la intimidad del menor en casos de gestación subrogada es un importante avance en la defensa de los derechos y la dignidad de los involucrados. Esta medida demuestra la necesidad de abordar este tema con la sensibilidad y el cuidado que merece, buscando siempre el bienestar y la protección de los menores.
