sábado, 23 noviembre 2024

El Vaticano anuncia que el Papa pedirá perdón por los pecados de la Iglesia antes del Sínodo

La Iglesia Católica se encamina hacia un importante momento de reflexión y autocrítica. El Papa Francisco ha convocado una vigilia penitencial que se celebrará el 1 de octubre en la Basílica de San Pedro, justo antes del inicio de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que se extenderá hasta el 27 de octubre.

Durante esta vigilia, abierta a todo el mundo, se llamará por su nombre a los pecados que más dolor y vergüenza han causado en la Iglesia. Serán tres los testimonios que se escucharán: de una víctima de la guerra, de los abusos y de las migraciones. Se confesarán los pecados contra la paz, la creación, los pueblos indígenas, los migrantes, las mujeres, las familias, los jóvenes y la pobreza. También se abordarán los pecados de los abusos, de la doctrina utilizada como arma contra el otro, y aquellos que van en contra de la sinodalidad, la comunión y la participación de todos.

Un Sínodo con Mayor Participación de Laicos

Según el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo, esta confesión de pecados no se trata de denunciar el pecado de los demás, sino de reconocerse parte de aquellos que, por omisión o acción, se convierten en causa de sufrimiento. Al final, el Papa Francisco dirigirá una petición de perdón a Dios y a la humanidad en nombre de todos los cristianos.

Una de las novedades de este Sínodo es que una cuarta parte de los 368 participantes no serán obispos, sino laicos, religiosos o sacerdotes. Aunque no habrá grandes cambios en la organización, se incluirán algunos foros abiertos al público para que los participantes puedan comprender mejor los temas sinodales. Sin embargo, las discusiones principales seguirán siendo confidenciales.

Temas Controvertidos Excluidos del Debate

El Papa ha dejado fuera de las discusiones del Sínodo los temas más controvertidos que fueron planteados en la asamblea de 2023. Estos incluyen cuestiones doctrinales, pastorales y éticas como el acceso de las mujeres al diaconado, el celibato sacerdotal, la ordenación de sacerdotes casados, la acogida a los homosexuales o a los divorciados vueltos a casar.

Tampoco se tratarán otros temas como la escucha del clamor de los pobres, la misión en el contexto digital, los criterios de selección de los candidatos al episcopado o los frutos del camino ecuménico. En su lugar, estos temas serán abordados por diez grupos de trabajo de expertos teólogos y funcionarios vaticanos, quienes deberán presentar sus conclusiones en junio de 2025.