Ventanas a medida para tu casa

Poner unas ventanas de calidad en casa es fundamental, ya que contribuyen a que exista un buen aislamiento. Eso significa que se gasta menos en calefacción, aire acondicionado y se disfruta de un mejor confort térmico.

Hoy en día, se colocan mucho las ventanas osciloparalelas. Generalmente, se pueden comprar unas de tamaño estándar, pero hay ocasiones en las que es necesario encargarlas a medida. No todas las empresas especializadas hacen este tipo de encargos, por eso hemos hablado con los responsables de Vencomad para que nos hablen de qué modelos de ventana suelen hacer a medida.

¿Tipos de ventanas a medida?

Hay muchas clases de ventanas y todas ellas se pueden personalizar con las dimensiones necesarias. Vamos a ver los más habituales en Vencomad:

Ventanas de madera

Pese a que existen muchos materiales con los que ahora se puede fabricar un cerramiento, lo cierto es que las ventanas de madera a medida siguen teniendo una demanda enorme.

La estética es inigualable y este material aísla muy bien tanto del frío como de la humedad, sobre todo si ha recibido un buen tratamiento.

Además, ha salido al mercado una ventana que se conoce como mixta. Su núcleo es de madera y se forra con aluminio. Se tiene así lo mejor de los dos mundos, ya que la madera aísla y rompe los puentes térmicos, a la vez que el aluminio la protege de las inclemencias del tiempo.

Contraventanas mallorquinas

Otro tipo de ventana son las contraventanas mallorquinas. Estas se caracterizan porque se instalan por fuera de la propia ventana en lugar de por el interior.

Tradicionalmente, tenían la misión proteger los cristales y la fachada, aunque ahora se emplean también para decorar. Eso sí, bien utilizadas, ayudan a aislar del calor del sol e impiden que la temperatura en el interior de la vivienda suba demasiado.

Antes solían ser de madera, pero ahora también se confeccionan con PVC o con aluminio.

Ventanas oscilobatientes

En estos momentos son unas de las ventanas más vendidas, ya que ofrecen varias ventajas sobre las tradicionales.

Se trata de una ventana que tiene dos formas de abrirse. Una, en su eje vertical, como una ventana de las de toda la vida, y la otra en su eje horizontal. Cuando se abre sobre este, deja una abertura de pequeño tamaño en la zona superior.

Eso permite ventilar sin riesgo de que la ventana se abra de pronto por una racha de viento y golpee, con el consiguiente riesgo que esto conlleva. Con la apertura horizontal eso no ocurre. No pasa tanto aire y es imposible que la ventana se cierre por las corrientes.

Ventanas osciloparalelas

Las ventanas correderas han evolucionado y ahora permiten una apertura distinta. De esa forma, si se quiere ventilar sin dejar pasar demasiado aire, solo hay que abrir la parte superior.

Esa zona se abre hacia dentro, como ocurre con las ventanas oscilobatientes. Así no hay que abrir toda la ventana, lo que deja un hueco enorme por el que puede pasar demasiado aire.

A su vez, y a diferencia de las ventanas correderas de toda la vida, estas ofrecen un buen aislamiento acústico y térmico.