Los vasos son los utensilios de uso más frecuente entre todos aunque, a pesar de esta funcionalidad, podrían ser los causantes de graves peligros para la salud. Los vasos de papel y de plástico están en la mira de los científicos que alertaron sobre su uso y sus riesgos.
Los utensilios de los mencionados materiales fueron motivo de análisis y, aunque el papel tiene «mejor fama» que el otro, son igual de peligrosos para la salud. El cuerpo recibe de ellos tóxicos que perjudicarían al sistema, por lo que habría que evitarlos para aumentar la calidad de vida y mejorar el medio ambiente.
Por qué los vasos pueden envenenarte
Un estudio reciente indica que los vasos de papel son igual de perjudiciales que los de plástico. Aunque la creencia general es que estos son una variante al nocivo plástico, poseen sustancia que pueden tener el mismo efecto en el cuerpo humano. Según una experta en Ciencias Ambientales de la Universidad de Gotemburgo, estos utensilios poseen un fina cubierta de plástico que “desprender sustancias químicas” al ambiente.
De acuerdo a los especialistas, los vasos biodegradables o de papel están recubiertos con una capa de ácido poliláctico, también conocido como PLA o bioplástico, que pueden instalarse en el ambiente y ser ingeridos por animales y humanos. Para conocer sus consecuencias, otros estudios sobre ratones analizaron los problemas en el sistema digestivo y descubrieron que partículas diminutas de plástico lograron acumularse en todos los tejidos examinados, incluso en las profundidades del tejido cerebral.
Las consecuencias de los plásticos en los vasos y otros utensilios
El uso de vasos plásticos y otros utensilios de este material pueden implicar un riesgo supremo en la salud y traer consigo algunas enfermedades. Algunos estudios sobre estos efectos concluyeron que pueden atraer ciertos tipos de cánceres, obesidad, diabetes, problemas de tiroides y asma infantil. Estos elementos poseen el bisfenol A (BPA), que es un estrógeno sintético débil que se encuentra en muchos productos de plástico rígido.
Por este motivo, desde algunos países de la Unión Europea se establecieron una serie de recomendaciones para utilizar este tipo de utensilios en las que se aconseja no cocinar alimentos en recipientes de plástico ni usar bolsas para hornear o cocinar a vapor. Tampoco deben utilizarse vasos de plástico con productos muy calientes (café, té, etc.) ya que el efecto es igual de nocivo. Además, se aconseja lavar bien los recipientes después de cada uso y no emplear la tapa para calentar.
