La controversia ha llegado a Valencia tras la denuncia pública por parte del diputado de Compromís, Francesc Roig, sobre un profesor de un colegio concertado de la ciudad que presuntamente promueve «terapias de conversión» a través de un libro. Roig afirma haber recibido «denuncias ciudadanas» sobre el uso de este material en el centro educativo y la realización de una presentación del mismo en sus instalaciones. Estos hechos, si se confirman, representarían un grave riesgo para la integridad y la salud mental de los estudiantes, particularmente aquellos con orientaciones sexuales o identidades de género diversas.
El caso ha suscitado un debate sobre la necesidad de garantizar un entorno seguro e inclusivo en las escuelas para todo el alumnado, evitando la discriminación y el acoso por motivos de orientación sexual o identidad de género. La situación también pone de manifiesto la importancia de la educación sexual integral en los centros educativos, promoviendo la aceptación y el respeto hacia la diversidad.
La Denuncia de Compromís y la Respuesta del Colegio
El diputado Francesc Roig ha acusado al profesor, autor del libro ‘Crecer como niños, crecer como niñas’, de promover «terapias de conversión» que él mismo denomina «de acompañamiento». Roig señala que el libro contiene una serie de «síntomas» o «señales de alarma» que pretenden identificar a los niños con una posible «orientación sexual no normativa», entre los que se incluyen:
- No jugar al fútbol.
- Tener predilección por ídolos femeninos.
- Preferir actividades sedentarias y menos agresivas.
- Llevar el cabello corto.
- Usar «ropa masculina».
- Desinterés por jugar con muñecas.
- Preferir actividades más físicas como «hacer volteretas» o hacer deporte.
Roig también denuncia que el autor del libro normaliza el acoso escolar hacia niños que no responden a su idea de masculinidad, argumentando que la «falta de masculinidad repele de forma inconsciente» a los compañeros acosadores y que «no lo hacen por maldad» sino como parte de su «proceso de conquista de la propia identidad».
Sin embargo, el Colegio Diocesano Santiago Apóstol ha desmentido «con total contundencia» la realización de cualquier tipo de «terapia» en el centro, asegurando que «jamás se ha permitido ningún tipo de discriminación o acoso». El colegio niega haber recibido denuncias por parte de familias, alumnos o la administración educativa.
Las «Terapias de Conversión» y la Necesidad de una Educación Inclusiva
Las «terapias de conversión» son prácticas que pretenden cambiar la orientación sexual o la identidad de género de una persona, generalmente a través de técnicas psicológicas, espirituales o físicas. Estas prácticas han sido ampliamente desacreditadas por la comunidad científica, y se consideran dañinas y peligrosas para la salud mental de las personas LGTBI.
La promoción de este tipo de «terapias» en un centro educativo es un hecho gravísimo que pone en riesgo el bienestar de los estudiantes. La escuela debería ser un espacio seguro e inclusivo para todos, donde se fomente el respeto a la diversidad y se garantice que todos los niños y niñas se sientan valorados y aceptados por quienes son.
La educación sexual integral es fundamental para construir un entorno escolar respetuoso y preventivo frente a la discriminación y el acoso. Esta educación debe promover la identidad de género, la orientación sexual, la afectividad y la sexualidad de forma integral, desde una perspectiva de derechos humanos y de salud.
En este caso, la actuación rápida y contundente de la Conselleria de Educación es crucial para proteger a los estudiantes y garantizar un entorno educativo seguro y libre de discriminación. Es fundamental que se investigue a fondo la denuncia y se tomen medidas para evitar que este tipo de prácticas se repitan en el futuro.