viernes, 13 diciembre 2024

PP Valencia denuncia la falta de un plan anti-covid eficaz en educación

La portavoz de Educación del Grupo Popular en les Corts Valencianes, Beatriz Gascó, ha considerado que «la falta de un plan anti-covid eficaz convierte a los centros educativos en bombas de relojería». A su juicio, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el conseller de Educación, Vicent Marzà, son «unos chapuceros que no tienen controlado el inicio de curso».

Beatriz Gascó se ha referido a las medidas anunciadas por la Conselleria de Educación para el inicio del próximo curso, que incluyen una partida extraordinaria de 207 millones y la contratación de 4.374 docentes más.

La ‘popular’ ha calificado de «despropósito» las medidas de la administración, que «demuestran una improvisación total, que no hay un plan serio y eficaz y, en el fondo, generan más inseguridad e incertidumbre entre las familias y la comunidad educativa».

«Estamos muy preocupados por la falta de una hoja de ruta eficaz porque los centros educativos van a convertirse en bombas de relojería. Espero que no nos llamen alarmistas porque la última vez que avisamos al Consell de la que se nos veía encima, por desgracia, acertamos en el pronóstico», ha manifestado.

Para Gascó, «hay un desprecio absoluto por parte de Marzà a la labor docente ya que les obliga a hacer tareas que no son de su competencia y para las que no están formados».

«Todo para que él y Puig no asuman ninguna responsabilidad. Se lavan las manos al cargar sobre los directores la elaboración de los planes de prevención en cada centro y la responsabilidad de posibles rebrotes. Degradan, explotan y maltratan a los docentes para ellos eximirse de responsabilidades», critica la parlamentaria en un comunicado.

En este sentido, la portavoz ‘popular’ ha exigido «la incorporación inmediata de la enfermera escolar en los centros educativos para que asuman las responsabilidades sanitarias y los profesores se dediquen estrictamente a labores pedagógicas porque no son enfermeros ni tienen capacidad para decidir sobre asuntos sanitarios».

«El Botànic tiene dinero para implantar la enfermería escolar, sólo es cuestión de voluntad política. La coordinación con los centros de salud es una completa temeridad porque los centros ya están saturados, esta medida lo único que va a hacer es empeorar las prestaciones sanitarias e incrementar más las esperas», ha agregado.

Asimismo, Gascó ha indicado que «los 200 millones de euros de más anunciados provienen del Estado». «Puig no hace ningún esfuerzo económico desde el Consell para garantizar la seguridad de los centros. Solo invierte lo que proviene del gobierno central. Son muchas las partidas con las que podrían garantizar la seguridad con profesionales sanitarios, test, material de protección personal diario. Pero su falta de trabajo, de planificación y de inversión evidencia que no están preparados para afrontar el curso escolar con garantías sanitarias», recalca.

«MUCHOS FRENTES ABIERTOS»

Además, señala la diputada que «siguen muchos frentes abiertos sin despejarse y a un mes para el inicio de curso». «Afirman garantizar la presencialidad en todas las etapas educativas y no es cierto. En la mayoría de los centros de secundaria esa presencialidad continua no se va a poder garantizar. Son muchos los alumnos que volverán a perder la mitad de curso. Hay que ofrecer alternativas a esos estudiantes y no limitarse a decirles que se queden en casa.

Respecto a la educación digital, para el PP hay «falta de formación, una plataforma que da muchos problemas y ningún proyecto concreto para repartir dispositivos y poner conectividad a los alumnos más desfavorecidos». «Faltan planes de refuerzo para compensar la asistencia de este curso y tampoco se han previsto ayudas para los ayuntamientos por el incremento de horas del personal de limpieza de los colegios», insiste.

Por último, Beatriz Gascó asevera: «Estamos ante otra chapuza más. Las familias y los docentes necesitan seguridad, instrucciones claras y saber a qué atenerse. El problema es que las consecuencias de esta falta de gestión y de planificación las pagarán toda la sociedad valenciana. Van a convertir a los centros educativos en centros de transmisión del virus por negarse a implementar las medidas necesarias».