El arroz meloso es un plato caracterizado por su textura suave y cremosa, un punto intermedio entre el arroz seco y el caldoso. Este tipo de preparación es un arte de la gastronomía que requiere un balance perfecto entre los ingredientes, el caldo y el tiempo de cocción. La receta que presentamos hoy no solo destaca por su sabor, sino también por la combinación única de ingredientes que elevan el arroz meloso a un nivel gourmet: secreto de cerdo y manzana.
El arroz meloso es, sin duda, una de las joyas de la cocina mediterránea. Su éxito radica en la capacidad de absorber los sabores de los ingredientes que lo acompañan, creando un plato lleno de matices. La preparación que sigue está diseñada para aquellos que buscan experimentar con sabores intensos y texturas suaves, combinando la jugosidad del secreto de cerdo con el dulzor sutil de la manzana.
Ingredientes clave para un arroz meloso perfecto
El secreto para un arroz meloso ideal está en la selección de los ingredientes y la manera en que se combinan. Para esta receta, necesitaremos: 400 g de secreto de cerdo, 100 ml de aceite de oliva virgen extra (AOVE), 2 tomates frescos, 20 g de nueces, 2 tomates secos, 200 ml de vino blanco, 1,3 litros de caldo de verduras, una infusión de azafrán, 320 g de arroz marisma, una manzana, 20 g de mantequilla, una cucharada de postre de pimentón dulce, pimienta y sal al gusto.
Cada ingrediente aporta su propio carácter al arroz meloso. El secreto de cerdo, cortado en dados y dorado, añade una riqueza suculenta que se complementa con el toque fresco y ligeramente ácido del tomate. El azafrán, por su parte, infunde el arroz meloso con un color dorado y un aroma inconfundible, mientras que la manzana cocida en mantequilla introduce una suavidad y dulzura que contrastan a la perfección con la robustez de la carne.
Paso a paso: Cómo lograr un plato insuperable
El proceso de preparación de este arroz meloso comienza con el dorado del secreto de cerdo en una cazuela con AOVE. Una vez sellada la carne, se retira y en la misma cazuela se añade el pimentón dulce y los tomates rallados, creando una base de sofrito rica y aromática. Aquí es cuando se incorpora la mezcla de nueces y tomates secos, previamente machacados en un mortero, para dar cuerpo al sofrito. El siguiente paso es reincorporar el secreto de cerdo junto con el vino blanco, permitiendo que el alcohol se evapore mientras los sabores se concentran.
El arroz marisma se añade después de reducir el sofrito, junto con el caldo de verduras y la sal al gusto. La clave para un arroz meloso está en la cocción: los primeros cinco minutos a fuego fuerte, seguidos de otros cinco a fuego medio y, finalmente, seis minutos a fuego bajo. Mientras el arroz absorbe lentamente el caldo, se prepara la manzana. Pelada y troceada, se cocina en mantequilla hasta que esté tierna, lista para integrarse al arroz meloso una vez apagado el fuego. Tras dejar reposar el arroz meloso durante cinco minutos, todos los sabores habrán armonizado y el plato estará listo para servir.
