José Luis Ábalos es un socialista de base, con un gran apoyo en la militancia tras más de medio siglo en el PSOE. No obstante, aún se desconocen los motivos y razones exactos por su cese, Pedro Sánchez no lo ha explicado hasta ahora ni tampoco el Gobierno está dispuesto a hablar sobre ello. El exministro de Transportes responde así a las preguntas de MONCLOA.
Ábalos insiste en que se ha conculcado la tutela judicial efectiva con la auditoría encargada por Óscar Puente. «El PP denunció varios contratos públicos por las mascarillas, pero la Fiscalía solo se detuvo en uno de ellos». «La Fiscalía emprende una investigación con un nivel de recursos que no es normal», ha afirmado.
«Nos han intervenido teléfonos, nos han puesto micrófonos en las mesas de restaurantes, geolocalizadores en los vehículos… El despliegue de la UCO de la Guardia Civil solo se hace con narcos y terrorismo», ha afirmado. «Se han gastado tanto dinero en la investigación que no se entiende; es una investigación claramente prospectiva», ha sostenido. «Van a ver qué pillan e investigan a Koldo (García) por ser Koldo, no por las mascarillas», ha asegurado. «Es una causa general a todo el que se haya acercado a saludarle», ha denunciado. «Han jodido a mucha gente que no tenía nada que ver con los contratos», ha señalado.
ÁBALOS CREE QUE EL CASO KOLDO QUEDARÁ EN NADA
A su juicio, cree que el caso Koldo será archivado, que habrá «reportajes» a posteriori que no servirán de nada dadas las portadas y los miles de noticias publicados hasta ahora. En este sentido, compara la situación con la de Teddy Bautista y la SGAE, que tras diez años de investigación por un supuesto desvío de dinero de la sociedad que cobra los cánones por la emisión de canciones salió absuelto de toda culpa en 2021. «Si esto acaba en nada, nadie va a reparar nada. Estás muerto. Son daños colaterales», ha recriminado.
«Son meros peones en una partida de lucha por el poder en la que se juntan muchas luchas por el micropoder», ha señalado, recordando así sus palabras cuando se asentó en al Grupo Mixto. «A esto se suma una batalla más con el informe de la auditoría, a la que tengo que dedicar mi tiempo, mi desvelo y mi dinero, que no tengo, innecesariamente», ha lamentado. La situación no sólo afecta directamente a Ábalos como persona, sino también a sus familiares, que no pueden hacer «vida como los demás». «Yo mismo no tengo ganas ni de salir. Estamos jodidos», ha asegurado. «Es una falta de empatía absoluta y una crueldad tremenda», ha resumido.
En cuanto a su relación con el PSOE, Ábalos ha indicado que tras pasar «toda la travesía del desierto sin molestar, compareciendo en los programas de televisión que me ofrecieron a mí y que puse a disposición del partido, la gente me lo ha valorado». «He defendido públicamente las posiciones de mi partido, después me recuperan y me plantean incluso irme a Europa», ha señalado. Cabe recordar que Pedro Sánchez estudió la posibilidad en febrero, pero saltó el caso Koldo en esos días.
LA AUDITORÍA HA SIDO TORPE E INNECESARIA
«La guinda ha sido la auditoría. Ha sido tan torpe, tan innecesario, tanta maldad… Pero no me voy a vengar por respeto a mí, no por los demás», ha considerado. No obstante, ha entrado en el meollo del asunto en su conversación con MONCLOA porque una cosa es vengarse y otra muy distinta votar «con conciencia o con ciencia». «Ahora votaré con más criterio, con más conocimiento», ha explicado.
«La conciencia del deber también es parte de la conciencia», ha señalado. Un mensaje que tiene un destinatario claro: aquellos que creen que la conciencia es «pura anarquía o discrecionalidad». Hay también una conciencia del deber y yo me debo a todo aquello que afecta al programa electoral, a la causa de los trabajadores, de los más desfavorecidos, de la Justicia y de la Democracia. «En todo eso me van a encontrar», ha sentenciado. «Ahora si la estrategia es oportunista o todo lo que sea un pragmatismo parcial no tengo por qué compartirlo», ha señalado.
Deja claro que siempre ha votado con conciencia, pero rechaza la «oportunidad política», que no es un voto con conciencia. «Hasta ahora he hecho seguidismo como si estuviera sometido a la disciplina de partido», ha recalcado. «Ahora estoy fuera de la disciplina y del seguidismo. Ya que han sido tan rápidos para incriminar, si quieren mi voto que lo pidan», ha advertido al PSOE.
SI QUIEREN MI VOTO QUE HABLEN CONMIGO
«No es una amenaza. No he movido ficha, pero lo que no puede ser tampoco es ser tan….», ha considerado. De esta forma, Ábalos deja en el aire sus próximos apoyos y abstenciones, más cuando lleva meses sin hablar con la dirección de Ferraz. «Lo que han hecho no es cualquier cosa», ha avisado. «Es una maniobra de cloaca y ya sabemos para qué se elaboran informes y cuál es la utilidad que tienen», ha dicho. «Esto es propio de cloaca», ha reiterado.
Según ha comentado, la maniobra de Óscar Puente no tiene otro fin que su dimisión y su renuncia al acta de diputado en el Congreso, pero el exministro no está por la labor, más cuando apunta que esta sería su última legislatura.
ÁBALOS LANZA UN PUYAZO A ÓSCAR PUENTE
En este sentido, ha recordado las veces que ha ejercido como portavoz de la Ejecutiva del PSOE cuando la obligación era de Óscar Puente, pero éste se plantó a los seis meses de ejercer. «Me tocó a mí asumir esa función», ha destacado. «Era portavoz para todo, el ministro político y el el secretario de la Organización», cuando hasta ahora en el PSOE nunca se había desdoblado dichas funciones.
En este sentido, ha recordado que Pepe Blanco cesó en el cargo cuando fue nombrado ministro de Fomento. «Soy yo quien puso la cara porque me lo pedían» para todo, desde la amnistía a los indultos, pero a mí no me iba esa marcha. Al respecto, el papel lo ha cogido Óscar Puente, con un perfil más bronco, duro, de pelea y de bronca. «Yo soy de otra manera», ha puntualizado Ábalos.