La Unión Europea ha experimentado un notable progreso desde su concepción original. Como señala el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, la UE ha avanzado «mucho más de lo que los padres fundadores pudieron imaginar». Sin embargo, el escenario actual presenta retos significativos, y Borrell afirma que «si Europa quiere sobrevivir tendrá que unirse más».
Uno de los desafíos clave es la necesidad de preparar a los europeos para enfrentar la «dureza del mundo». Borrell señala que los europeos vivimos en una «situación envidiable de libertades políticas, de progreso económico, de cohesión social», lo que ha generado una tendencia a creer que «todo el mundo es así». Pero la realidad es que en otras partes del mundo, el panorama es mucho más áspero, difícil y cruel, con conflictos violentos como norma.
La Seguridad y Defensa, un Pilar Esencial para la Unión Europea
En este contexto, el concepto de seguridad y defensa adquiere una importancia crucial para la Unión Europea. Borrell subraya que este aspecto no formaba parte del discurso inicial en la creación de Europa, pero será determinante en los próximos años. Aunque la UE no tiene un ejército europeo y no lo tendrá en un futuro cercano, es evidente que la Europa que construyó la paz entre europeos ahora se enfrenta a un mundo en el que «la violencia es la norma en demasiados sitios».
Esto implica que la UE debe evolucionar para hacer frente a estos nuevos desafíos. Borrell insiste en que «hicimos la Europa de la paz entre europeos, pero no es suficiente si nos olvidamos de que el resto del mundo que llama a nuestra puerta es un mundo duro, violento y cruel». Es fundamental que los europeos comprendan que ya no basta con garantizar la paz interna, sino que deben estar preparados para afrontar los retos de un entorno internacional cada vez más complejo y turbulento.
La Unión Europea Debe Profundizar su Integración para Sobrevivir
En resumen, la Unión Europea se enfrenta a un escenario global en el que la violencia y la dureza son cada vez más predominantes. Esto obliga a la UE a replantearse sus prioridades y a profundizar en su proceso de integración, tal como señala Borrell. Los europeos deben estar preparados para asumir nuevas responsabilidades y no conformarse con los beneficios que la integración europea ha traído hasta ahora.
Es crucial que los jóvenes europeos sientan a la UE como algo más que un mero conjunto de ventajas, y que la perciban como una estructura que exige un compromiso y una implicación activa. Solo así podrá la Unión Europea hacer frente a los desafíos que se avecinan en un mundo cada vez más hostil y violento. La unidad, la seguridad y la defensa se perfilan como los pilares fundamentales para que la UE pueda sobrevivir y prosperar en este nuevo escenario global.
«Los europeos no estamos preparados para hacer frente a la dureza del mundo», afirma al recibir el Premio Navarra Puerta de Europa PAMPLONA, 26 (EUROPA PRESS) El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, ha afirmado que la Unión Europa ha avanzado «mucho más de lo que los padres fundadores pudieron imaginar», pero ha señalado que en el contexto actual el grado de integración de la UE es «a todas luces insuficiente» y ha afirmado que «si Europa quiere sobrevivir tendrá que unirse más». Borrell ha recibido este lunes en Pamplona el II Premio Internacional Navarra Puerta de Europa en el marco de los Cursos Europeos de Verano, organizados por Diario de Navarra y Equipo Europa. «Hemos de pasar el testigo a unos jóvenes que sientan Europa como algo más que un conjunto de beneficios, que la sientan como un conjunto de responsabilidades –ha indicado–. Los europeos no estamos preparados para hacer frente a la dureza del mundo, vivimos en una situación envidiable de libertades políticas, de progreso económico, de cohesión social, y tenemos la tendencia a creer que todo el mundo es así, pero no todo el mundo así. En otras partes, el mundo es áspero, difícil, cruel, enfrentado a guerras, donde la fuerza se utiliza como argumento de solución de los conflictos». Según el alto representante de la UE, el concepto de seguridad y defensa no formaba parte del discurso inicial en la creación de Europa, pero ha subrayado que será determinante en los próximos años. «No tenemos ejército europeo y no lo vamos a tener, al menos en mucho tiempo, pero la Europa que construyó la paz entre europeos se enfrenta a un mundo en el que la violencia es la norma en demasiados sitios», ha indicado. Así, ha insistido en que «hicimos la Europa de la paz entre europeos, pero no es suficiente si nos olvidamos de que el resto del mundo que llama a nuestra puerta es un mundo duro, violento y cruel». (Habrá ampliación)
