La ensalada de mejillones es una receta que combina simplicidad, rapidez y un gran sabor. Este plato es ideal para quienes buscan una opción rápida y saludable sin sacrificar el gusto. Los mejillones en conserva, ricos en proteínas y minerales, se combinan con vegetales frescos y queso feta, creando una ensalada que es tan nutritiva como deliciosa. En tan solo tres minutos, es posible tener lista esta ensalada que destaca por su frescura y colorido, siendo perfecta tanto para una comida ligera como para acompañar cualquier otra preparación.
Para preparar la ensalada de mejillones, es necesario contar con ingredientes accesibles y frescos. Los ingredientes principales son 80 gramos de mejillones en conserva en escabeche, 50 gramos de queso feta, medio pimiento rojo, medio pimiento verde, 10 aceitunas negras, dos tomates y cinco o seis ramas de perejil fresco. También se necesitan aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta negra molida para el aliño. Estos ingredientes se combinan para crear una ensalada que es una explosión de sabores y texturas, con un equilibrio perfecto entre lo crujiente de los vegetales y la suavidad de los mejillones y el queso feta.
Preparación rápida y sencilla de la ensalada de mejillones
El primer paso para preparar la ensalada de mejillones es lavar y picar en pequeños dados los pimientos y los tomates. Este proceso asegura que los vegetales estén frescos y listos para mezclar con los otros ingredientes. Luego, se deben picar las aceitunas negras y el perejil fresco, aportando un toque de color y sabor adicional a la ensalada. Por su parte, el queso feta debe desmenuzarse, lo que permitirá que se integre de manera uniforme en cada bocado, añadiendo una textura cremosa al plato.
A continuación, es importante escurrir los mejillones del escabeche, pero reservando este líquido, ya que se utilizará para el aliño. Para preparar el aliño, se mezcla una parte de aceite de oliva virgen extra con media parte del escabeche reservado. Se añade sal y pimienta negra molida al gusto y se bate bien con unas varillas hasta conseguir una mezcla cremosa y bien emulsionada. Este aliño impregnará todos los ingredientes de la ensalada de mejillones, resaltando sus sabores y aportando un toque especial que hará que el plato sea aún más delicioso.
Montaje y presentación
Una vez que el aliño está listo, se deben introducir los pimientos, los tomates y las aceitunas en la mezcla, removiendo bien para que se impregnen de la vinagreta. Esta combinación de sabores y texturas se coloca sobre la base de una fuente de servir, creando la base de la ensalada. Luego, se colocan sobre esta mezcla los mejillones escurridos, el queso feta desmenuzado y el perejil picado, lo que dará como resultado un plato vistoso y apetecible, listo para ser disfrutado.
La ensalada de mejillones debe servirse inmediatamente después de su preparación para garantizar que todos los ingredientes mantengan su frescura y sabor. Este plato no solo es ideal para una comida ligera o una entrada, sino que también es una excelente opción para compartir en reuniones y cenas, ofreciendo un toque sofisticado y saludable a cualquier menú. Con su combinación de ingredientes nutritivos y su fácil preparación, esta ensalada es una opción versátil que puede adaptarse a diferentes gustos y ocasiones.
