El caso Begoña Gómez acorrala a la exministra de Industria y Turismo y líder del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, por un megacontrato de más de 285,6 millones de euros licitado en 2017 y adjudicado en febrero de 2018. La adjudicación fue prorrogada, como el montante, en 2022. No obstante, en el momento del anuncio de la licitación, una de las empresas recurrió el concurso por el pliego técnico de prescripciones técnicas, sin que hubiera una suspensión automática del expediente 54/17.
El megacontrato tenía como objetivo centralizar el servicio de agencia de viajes de la Administración General del Estado. Se dividió en cinco lotes, por Ministerios, que ha centrado ahora las investigaciones de la acusación popular de Hazte Oír, representada por Vox ante el juez del Juzgado de Instrucción 41 de Madrid, Juan Carlos Peinado, por el contenido de los lotes 2 y 3, ambos adjudicados a Globalia a través de Viajes Halcón y los únicos que obtuvieron una prórroga en 2022, según el registro.
Este expediente no ha salido hasta ahora a la luz, pero salpica directamente a la líder del PSOE en la capital de España. Sobre este asunto, la ahora exministra de Industria guarda silencio, mientras las acusaciones populares estrechan el cerco sobre Maroto por sus conexiones con Begoña Gómez y sus reuniones en distintas ciudades.
REYES MAROTO Y SU CONEXIÓN CON EL CASO BEGOÑA GÓMEZ
HazteOír apunta a una conexión que se remonta desde 2018 en adelante, tumbando así el principal argumento de la defensa de la mujer del presidente del Gobierno, dirigida por Antonio Camacho, centrado en una supuesta «investigación prospectiva», un hecho que de ser cierto pondría contra las cuerdas al juez Peinado. De ahí que tanto Begoña Gómez como su marido, Pedro Sánchez, acusen al magistrado de prevaricación, el peor delito que podría cometer un funcionario público.
Para mostrar los nexos de unión entre Reyes Maroto y Begoña Gómez, imputada en la causa por tráfico de influencias y corrupción en los negocios, este megacontrato sería una conexión más que hilaría el mismo método supuestamente utilizado desde 2018, más cuando se producen ciertas anomalías, como los cambios y modificaciones del contrato para incluir a la Casa Árabe, la Casa África y la Casa del Mediterráneo en el mismo lote de Globalia. Asimismo, el contrato solo se prorrogó para esta empresa, controlada entonces por Javier Hidalgo.
Además, Reyes Maroto estuvo en el evento de San Petersburgo, el mismo en el que Begoña Gómez y Javier Hidalgo se reunieron en un hotel en 2019, mientras también estuvo muy presente en el rescate de Air Europa, que en un principio pidió más de 900 millones de euros y que le fueron concedidos 475 millones. La acusación popular escudriña en todos los contratos para conocer realmente la aportación pública dada a la aerolínea al entender que la cifra total podría acercarse y mucho a la cantidad inicialmente pedida a la SEPI.
«El juez espera aún al informe de la SEPI para conocer todos los entresijos del rescate de Air Europa», según apuntan fuentes conocedoras de la acusación, que muestran su asombro por el hecho de que Reyes Maroto podría estar involucrada en el caso. Cabe destacar que Maroto no se ha pronunciado sobre este asunto ni tampoco se le han pedido explicaciones públicas sobre este asunto. «Al resto de testigos e investigados se le ha llamado incluso dos veces ante el juez y en sede parlamentaria», advierten. También se muestra interés por los viajes a República Dominicana, entre otros vínculos.
LA IMPUGNACIÓN SE RESOLVIÓ A FAVOR DE GLOBALIA POR INTERÉS PÚBLICO
La Administración resolvió favorablemente para Globalia la modificación impugnada. Paloma Rosado Santurino, directora General de Racionalización y Centralización de la Contratación, argumentó razones de interés público para dar luz verde a los cambios. «Dentro de los límites y con sujeción a los requisitos y efectos señalados en la presente Ley, el órgano de contratación ostenta la prerrogativa de interpretar los contratos administrativos, resolver las dudas que ofrezca su cumplimiento, modificarlos por razones de interés público, acordar su resolución y determinar los efectos de ésta», apunta.
«Los contratos del sector público podrán modificarse siempre que en los pliegos o en el anuncio de licitación se haya advertido expresamente de esta posibilidad y se hayan detallado de forma clara, precisa e inequívoca las condiciones en que podrá hacerse uso de la misma, así como el alcance y límites de las modificaciones que pueden acordarse con expresa indicación del porcentaje del precio del contrato al que como máximo puedan afectar, y el procedimiento que haya de seguirse para ello», prosiguió la Administración.
Así, se hizo eco de las propias cláusulas del pliego. «La empresa adjudicataria prestará los servicios contratados en sus propias instalaciones desde un Centro de Gestión Centralizada (en adelante, CGC), así como en los centros de la AGE que, por sus circunstancias, precisan de atención in situ; estas oficinas, denominadas ‘Oficinas de Viajes’, son las determinadas para cada lote en el Anexo I de este pliego», señala la resolución.
GLOBALIA, BENEFICIARIA DE LA MODIFICACIÓN EN EL LOTE 3
«Podrán crearse más oficinas de mutuo acuerdo entre el órgano de contratación y la empresa adjudicataria si las circunstancias del servicio lo requieren, o podrán eliminarse oficinas si así lo considera necesario la AGE», destaca la resolución de la directora de Racionalización.
Además, se argumentó que la modificación no implicó un aumento del precio del contrato ni se procedió al reajuste de la garantía definitiva. Con ello, se modificó el Anexo I del Pliego de Prescripciones Técnicas, impugnado, y se procedió al cierre definitivo de la oficina de viajes del Ministerio de Educación y Formación Profesional pasando sus usuarios a ser atendidos desde el Centro de Gestión Centralizada del lote 3, obtenido por Globalia.
El caso Begoña Gómez aún espera a la declaración de Leticia Lauffer, exdirectora de Wakalua (filial de Globalia), así como la declaración de Luis Miguel Ciprés, director ejecutivo (CEO) del Grupo Barrabés.Biz. Su declaración es importante porque deberá ratificar punto por punto para no caer en contradicciones con el propietario de la empresa, Carlos Barrabés.
Ciprés será interrogado sobre las cartas de recomendación que firmó Begoña Gómez para presentar a licitaciones públicas y sobre el autor de esas cartas, ya que el juez Peinado sospecha que la esposa del presidente del Gobierno se habría limitado a firmarlas, pero no a redactarlas. El CEO de Barrabés.Biz está obligado a declarar y a decir la verdad, ya que acude como testigo. Ambas declaraciones tendrán lugar el próximo 26 de agosto.
Este contrato centró la atención de la asociación HazteOír, que forma parte de la acusación popular dirigida por Vox en el caso Begoña Gómez, y se incluyó en la tercera ampliación de la querella contra la esposa del presidente del Gobierno y el empresario Juan Carlos Barrabés, ambos investigados por tráfico de influencias y corrupción en los negocios. La querella se centra en el expediente 54/17, un contrato concedido de «urgencia» a Globalia para la centralización de viajes de distintos Ministerios.
EL CONTRATO DEL CASO BEGOÑA GÓMEZ: 21 MODIFICACIONES, RECTIFICACIONES Y PRÓRROGAS
El contrato se realizó mediante cinco lotes, dos de los cuales fueron adjudicados a Globalia, el segundo y el tercero. Los adjudicatarios del mismo fueron el Ministerio de Defensa, Interior, Agricultura, Empleo y Seguridad Social, Fomento, Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. El lote tres se adjudicó a Asuntos Exteriores, Presidencia, Administración Territorial, Educación y Justicia; mientras el lote dos fue a parar a Economía, Industria y Competitividad, Energía y
Turismo y Hacienda.
El contrato se licitó el 6 de octubre de 2017, según la licitación, pero no se llegó a adjudicar hasta el 8 de marzo de 2018. No obstante, en ese período se registraron 21 modificaciones, dos rectificaciones de modificación de contrato y otras dos en los pliegos del contrato. Lo chocante del asunto son las fechas de las modificaciones. Por ejemplo, el 1 de febrero de 2019 se llevaron a cabo hasta seis modificaciones con tan solo veinte minutos de diferencia.