La ciudad de Sueca se encuentra en el centro de una intensa disputa política, con concejales de tres partidos diferentes uniéndose para presentar una moción de censura que busca destituir al actual alcalde socialista, Dimas Vázquez. Este movimiento, sin precedentes en la historia reciente del municipio, refleja la profunda crisis que sacude al gobierno local y plantea interrogantes sobre el futuro político de Sueca.
La moción de censura, firmada por ediles de Compromís, Sueca per Davant y la exportavoz municipal del PP, será votada el próximo 14 de agosto a las 12.00 horas, según han confirmado fuentes conocedoras del proceso. El acuerdo alcanzado contempla que el liderazgo del futuro gobierno municipal recaiga en Julián Sáez, portavoz de Sueca per Davant, con el apoyo externo del PP.
Críticas a la Gestión del Alcalde
Los firmantes de la moción han esgrimido una serie de argumentos para justificar su acción, entre los cuales destaca la «falta de transparencia y pésima gestión de los recursos económicos» del Ayuntamiento. Según exponen, Sueca ha pasado de tener importantes ahorros a una situación de escasez, a pesar de que el nivel de vida y los servicios se han visto incrementados.
Asimismo, los concejales critican la «falta de comunicación y pérdida de confianza en el equipo de gobierno», señalando que la relación entre el grupo municipal mayoritario del PSPV-PSOE y los partidos de la oposición, Compromís y PP, así como con Sueca per Davant, con quien inicialmente compartieron el gobierno, se ha deteriorado a lo largo de la legislatura, conduciendo a una «ingobernabilidad» del Ayuntamiento.
El Pulso por el Control del Ejecutivo Local
La presentación de esta moción de censura ha provocado, además, una ruptura dentro del grupo municipal del PP, con los dos concejales que no firmaron el documento expulsando a su portavoz, Carolina Torres, y pactando con el alcalde Vázquez para entrar en el gobierno local. Este movimiento ha desencadenado la propuesta de medidas disciplinarias por parte del partido contra los concejales discrepantes.
Para el entorno del actual alcalde, esta acción es interpretada como un «asalto a la alcaldía» con el «único» interés de que Compromís vuelva a formar parte del Ayuntamiento «al precio que sea», y por parte de Sueca per Davant, de convertirse en «una subdelegación» del partido que gobierna en la Diputación de Valencia junto al PP.
La ciudad de Sueca se encuentra, pues, ante un escenario político en ebullición, con una moción de censura que pone en jaque al actual alcalde y plantea un reordenamiento del poder municipal. Las próximas semanas serán cruciales para determinar el desenlace de esta disputa, que está poniendo en entredicho la estabilidad y la gobernabilidad de la ciudad.