Economía.- Siete de cada diez economistas descartan una mejora de la economía en el segundo semestre del año, según CGE

La economía española se enfrenta a un panorama complejo y desafiante durante los próximos meses. Según el último «Barómetro Económico» publicado por el Consejo General de Economistas de España (CGE), la mayoría de los economistas encuestados (76,4%) prevén que la situación económica empeorará o seguirá igual en la segunda mitad de 2024. Este escenario pone de manifiesto la necesidad de abordar los principales factores que afectan a la competitividad de la economía española y tomar medidas para impulsarla.

En este contexto, es fundamental analizar las perspectivas y retos a los que se enfrenta el país, con el objetivo de comprender la situación actual y plantear soluciones efectivas. A continuación, exploraremos en detalle los principales aspectos que inciden en el desempeño de la economía española, desde la presión fiscal hasta los costes salariales y el precio de la energía.

Evolución de la Situación Económica

La percepción general de los economistas españoles sobre la evolución de la economía a nivel nacional es menos optimista que a nivel provincial y autonómico. Mientras que el 53,42% de los encuestados cree que la economía empeorará en la segunda mitad de 2024, solo el 32,41% y el 28,66% tienen esta misma percepción a nivel provincial y autonómico, respectivamente.

Esta diferencia en las expectativas refleja la complejidad de la situación actual. Si bien los economistas reconocen que la economía real no termina de despegar por completo, la mejoría de las expectativas a nivel de las comunidades autónomas sugiere que existen oportunidades y potencial de crecimiento en determinadas regiones.

Además, la percepción sobre el impacto de los conflictos y tensiones geopolíticas actuales también ha evolucionado. Mientras que en el semestre anterior el 90,4% de los economistas creían que afectaría negativamente al crecimiento de la economía española, en el último barómetro este porcentaje ha disminuido al 59%.

Factores Clave para la Competitividad

Uno de los principales desafíos que enfrenta la economía española es la presión fiscal, que según el 73,4% de los economistas encuestados es el factor que más afecta a la competitividad. Esto evidencia la necesidad de abordar la carga impositiva y promover medidas que fomenten la actividad empresarial y la inversión.

Otro factor clave es el coste salarial, que el 68,1% de los economistas considera como uno de los principales obstáculos a la competitividad. Es importante encontrar un equilibrio entre la protección de los derechos de los trabajadores y la sostenibilidad de las empresas, de manera que se genere un entorno laboral productivo y atractivo para la inversión.

Asimismo, el precio de la energía es un elemento que preocupa a más de la mitad de los economistas (56,7%), reflejando la necesidad de impulsar la transición energética y diversificar las fuentes de suministro para reducir la vulnerabilidad del país ante las fluctuaciones de los mercados internacionales.

Otros factores que, aunque en menor medida, también afectan a la competitividad son el fraude empresarial y la falta de apoyo a la I+D+i. Abordar estos aspectos de manera integral, junto con las principales preocupaciones identificadas, es fundamental para mejorar la posición competitiva de la economía española.

Conclusión

La economía española se enfrenta a un panorama complejo, con una mayoría de economistas previendo un empeoramiento o estancamiento de la situación en la segunda mitad de 2024. Sin embargo, existen diferencias en las percepciones a nivel regional, lo que sugiere que existen oportunidades de crecimiento y desarrollo en determinadas áreas.

Para impulsar la competitividad de la economía española, es crucial abordar los principales factores que la afectan, como la presión fiscal, los costes salariales y el precio de la energía. Además, es necesario prestar atención a otros aspectos como el fraude empresarial y el apoyo a la I+D+i, con el objetivo de crear un entorno empresarial más favorable y propiciar la innovación.

Mediante un enfoque integral y la implementación de políticas efectivas, la economía española puede superar los desafíos actuales y aprovechar las oportunidades para alcanzar un crecimiento sostenible y mejorar su posición competitiva a nivel nacional e internacional.