El mercado laboral español ha experimentado una evolución positiva en la primera mitad del año, con una reducción de 222.600 parados y un aumento de 434.700 empleados, alcanzando una cifra récord de 21,68 millones de empleados. Esta información ha sido comunicada por el sindicato UGT en un comunicado, en el que señalan que, si bien estos datos son alentadores, aún existen problemas estructurales que requieren una solución urgente.
Uno de los principales desafíos identificados por UGT es el trabajo a tiempo parcial involuntario, que afecta a 1,35 millones de personas, es decir, el 46% de los empleados en esta modalidad. Asimismo, la tasa de paro de larga duración se mantiene en niveles muy elevados, con un 40% de los desempleados llevando más de un año sin trabajo. Estos problemas estructurales deben ser abordados de manera prioritaria para lograr una recuperación laboral sostenible.
Mejorando la Capacidad de Intermediación de los Servicios Públicos de Empleo
Para hacer frente a estos desafíos estructurales, UGT ha instado a los servicios públicos de empleo a mejorar su capacidad de intermediación y a orientar, acompañar e incrementar la empleabilidad de las personas desempleadas. Esto implica desarrollar estrategias más efectivas para conectar a los trabajadores con las oportunidades laborales y brindar un apoyo integral a quienes llevan más tiempo sin empleo.
Además, UGT ha señalado que existe un margen de mejora en la creación de empleo en sectores de alto valor añadido, lo que está estrechamente ligado al cambio de modelo productivo que está experimentando la economía española. Impulsar el desarrollo de estos sectores estratégicos puede ser clave para generar empleos de calidad y reducir los desequilibrios estructurales del mercado laboral.
Hacia una Recuperación Laboral Sostenible
La reducción del desempleo y el aumento de la ocupación registrados en el primer semestre del año son sin duda logros importantes que deben ser celebrados. Sin embargo, UGT ha advertido sobre la necesidad de abordar los problemas estructurales que persisten en el mercado laboral español, como el trabajo a tiempo parcial involuntario y el paro de larga duración.
Para avanzar hacia una recuperación laboral sostenible, es fundamental que los servicios públicos de empleo mejoren su capacidad de intermediación y brinden un apoyo integral a los trabajadores desempleados, especialmente a aquellos que llevan más tiempo sin empleo. Asimismo, el impulso a los sectores de alto valor añadido puede ser una estrategia clave para generar empleos de calidad y reducir los desequilibrios estructurales del mercado laboral.
En resumen, la evolución positiva del empleo en España es un avance significativo, pero los desafíos estructurales aún requieren de una atención prioritaria por parte de las autoridades y los agentes sociales, con el objetivo de lograr una recuperación laboral sólida y duradera.