En un ambiente de creciente tensión dentro del Partido Demócrata, Joe Biden enfrenta intensas presiones para reconsiderar su candidatura a la reelección.
Un demócrata con estrechos lazos con la administración actual, y que fue compañero de clase de algunos miembros del gobierno, ha expresado su preocupación.
«Sigo mandando emails a mis amigos de la Casa Blanca pidiéndoles que convenzan al presidente de que se vaya, aun a sabiendas de que no me van a responder. Esto me está costando buenas amistades», declaró, reflejando el sentir de muchos críticos de la candidatura.
A pesar de la falta de respuesta oficial, el diario New York Times informó que está considerando la posibilidad de retirar su candidatura, aunque aún no ha tomado una decisión definitiva.
Actualmente, el presidente se encuentra en su residencia en Delaware, en aislamiento tras ser diagnosticado con Covid-19. La mera idea de retirar su candidatura, que desataría un proceso caótico para encontrar un reemplazo a solo tres meses de las elecciones, es un tema que Joe se había negado a considerar hasta ahora.
Diversos medios indican que la decisión podría ser inminente. El portal Axios señala que algunos altos cargos demócratas creen que Biden podría anunciar el fin de su campaña este mismo fin de semana. La cadena CBS, citando a dos legisladores demócratas, apunta a que la polémica podría resolverse en los próximos tres o cinco días.
1Presiones a Biden
La expresidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, ha jugado un papel crucial en este proceso. Según The Washington Post, Pelosi ha estado en conversaciones privadas con Biden, tratando de convencerlo de abandonar la candidatura. Tres oficiales demócratas informaron que Pelosi ha adoptado un rol discreto pero firme como intermediaria entre los dirigentes del Partido Demócrata y el presidente.
El frente de batalla dentro del partido es amplio. Los sectores más poderosos del Partido Demócrata, exceptuando el ala izquierdista que tradicionalmente ha sido crítica de Biden, ahora se unen para pedir su retirada. Incluso Barack Obama ha expresado dudas sobre la viabilidad de la reelección de Biden, sugiriendo a su entorno que el presidente debe reconsiderar su futuro político.
La situación se ha agravado con el diagnóstico de Covid-19 de Biden, que ha llevado a su retirada temporal de la vida pública. Este desarrollo contrasta fuertemente con la Convención Republicana, donde Donald Trump ha mostrado una fuerte presencia y apoyo.
Los críticos de Biden no solo temen perder las elecciones, sino que creen que estos comicios serían fáciles de ganar con otro candidato. Según las estadísticas, a pesar de los reveses, Biden sigue cercano a Trump en las encuestas, lo que hace dudar a algunos sobre la necesidad de abrir un vacío político sin precedentes.
El núcleo duro de apoyo a Biden es reducido pero firme, liderado por su esposa Jill Biden, quien ha sido una figura clave en su decisión de buscar la reelección. Con su apoyo, Biden podría resistir las presiones y continuar con su campaña, aunque la situación sigue siendo incierta y las próximas semanas serán cruciales para definir el panorama político del Partido Demócrata.
