La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, ha asegurado que es una «ingenuidad» pensar que el Gobierno se desplomará «por su propio peso» o caerá por sus «contradicciones internas», ya que, según ha recalcado, Pablo Iglesias «es capaz de aguantar 20 rescates antes de abandonar Moncloa» por su «ansia infinita de poder». En este escenario, ha llamado a «ampliar la base del PP» y construir una «firme y clara alternativa» basada en una agenda reformista y que «sume todo lo que está al lado de la razón».
Así se ha pronunciado en las jornadas ‘Activemos España con Europa’ organizadas por el PP en el marco de los cursos de verano de la Universidad Complutense celebrados en la localidad madrileña de San Lorenzo de El Escorial. Le han acompañado la portavoz del PP en Bruselas, Dolors Montserrat, y el portavoz en el Senado, Javier Maroto, en una mesa moderada por el secretario general del partido, Teodoro García Egea.
Álvarez de Toledo ha criticado la «entrada triunfal» de Sánchez este miércoles en el Congreso, con «gran jolgorio», «aplausos» y «ovaciones» de su grupo parlamentario. «No imagino a Merkel ni a Macron ni a Rajoy ni a Aznar en una situación similar», ha manifestado.
En este punto, ha afirmado que el Ejecutivo de coalición, para «suplir sus inmensas carencias», ha desarrollado una «capacidad de propaganda y de publicidad notable». «El manual de resistencia famoso –en alusión al libro de Sánchez– es en realidad un manual de propaganda. Resiste a través de la propaganda», ha exclamado.
«FALSO PATRIOTERISMO» DE SÁNCHEZ
Álvarez de Toledo ha recalcado que detrás de ese «jolgorio» se esconden «dos inmensos fracasos», el de su gestión en la crisis sanitaria del coronavirus y el de las negociaciones europeas tras sus propias expectativas. «Entre el plan inicial planteado por Sánchez, lo que iba a traer de Europa y lo que ha traído, media una distancia notable», ha manifestado.
Así, ha indicado que el Gobierno ha presentado el acuerdo europeo como «una gesta patriótica» frente a los «malvados que buscaban que tropezara el Gobierno», acusando al PP y otros partidos. «Creo que no es patriotismo vender ficciones a los ciudadanos y luego acusar a los demás de pretender obstaculizar la senda de la recuperación española», ha dicho, para acusar a Sánchez de «falso patrioterismo» cuando viene a España con «rebajas» pero pretende «vender su gesta» ante los demás.
La portavoz del Grupo Popular ha insistido en que el «sanchismo» tiene una «capacidad de propaganda, manipulación y tergiversación de la realidad muy notable», «sepultando la verdad» y con las «percepciones imponiéndose a los hechos». Por eso, ha dicho que el PP tiene como tarea «desmontar esas percepciones falsas y trabajar con los hechos».
SÁNCHEZ, «VERSIÓN EMPEORADA» DE ZAPATERO
La dirigente del PP ha subrayado que el reformismo «triunfó muchos años» transformando España con los gobiernos de Felipe González, José María Aznar y Mariano Rajoy. «En medio hubo una persona que está en la sala de al lado, José Luis Rodríguez Zapatero, que inaugura una nueva era de ruptura en España y alimenta a los rupturistas», ha afirmado, en alusión al expresidente socialista que esta misma tarde ofrecía una conferencia en San Lorenzo de El Escorial.
A renglón seguido, ha comparado al presidente actual con Zapatero. «Sánchez es básicamente el continuador de Zapatero y una versión corregida, empeorada y aumentada de Zapatero, que supone la ruptura del PSOE con ese gran acuerdo y consenso reformista español», ha enfatizado.
Álvarez de Toledo ha criticado que Sánchez siga con esa «agenda rupturista» con la mesa de diálogo bilateral con Cataluña, la «aceptación pasiva, cruzado de brazos de la excarcelación» del republicano Oriol Junqueras, la «legitimación» de Bildu como interlocutor válido o los «ataques» a instituciones como la Monarquía para «desviar la atención sobre fracasos» como la gestión de la pandemia.
«Esta agenda de ruptura no conduce absolutamente a ninguna parte, si acaso a una radicalidad nihilista, al centro de la nada, a la decadencia española», ha afirmado la dirigente del PP, para insistir en que esa agenda lleva a una «etapa de decadencia y agonía».
EL PACTO EUROPEO, UN «GOLPE DE REALIDAD»
Eso sí, ha dicho que ese acuerdo en Europa es una «buena noticia» dentro de esa «agenda de ruptura» porque es un «golpe de realidad», dado que no va a «haber ayudas para la agenda radical» o «contrarreformista». A su entender, Sánchez «va a tener que elegir, si acepta las condiciones del reformismo europeo o si acepta las condiciones del radicalismo de Podemos y de sus terminales separatistas».
«Esa agenda de populismo radical y rupturista no es compatible con el acuerdo europeo ni con una salida de la crisis en España», ha asegurado, para insistir en que el pacto en Europa es una «freno de emergencia» a esa «agenda de ruptura».
En esta línea, ha avisado que, pese a que es un Gobierno «políticamente frágil» y puede «causar profundos estragos en España», no «necesariamente se caerá por su propio peso o sus contradicciones internas». A su entender, pesar que eso se va a desplomar por su propio peso es «una ingenuidad».
«Es un error pensar que el Gobierno se puede caer por sus contradicciones internas. Creo que Iglesias es capaz de aguantar 20 rescates antes de abandonar la Moncloa. Creo que me quedo corta. Creo que es capaz de aguantar los recortes más severos con tal de seguir en el poder y seguir en la Moncloa», ha aseverado, para recalcar que tanto a Sánchez como a Iglesias les une una «ansia infinita de poder y de control de los recursos públicos».
Eso sí, la portavoz del PP ha pronosticado que el Gobierno va a dar la «batalla del control de las conciencias» en una «enorme batalla ideológica». A su entender, el «mayor peligro es que se consolide ese cambio de mayoría social».
DAR LA BATALLA CULTURAL
En ese escenario, ha pedido «reforzar la mayoría social de la cordura y la sensatez» que, en su opinión, ya no es ni de derechas o de izquierdas sino de «la razón». Así, ha llamado al PP a construir una «inmensa, poderosa, firme y clara alternativa política, económica y cultural» basada en una «ambiciosa agenda reformista» que haga frente a esa «agenda de ruptura» del Gobierno de coalición.
Álvarez de Toledo ha señalado que en el objetivo «esencial» del PP de ampliar la base social hay un «terreno fértil» con un espacio que la izquierda política ha dejado «huérfano». «Es el campo de la llamada batalla cultural», ha dicho, para añadir que cada vez más voces en la izquierda clásica se pronuncian contra «el dogmatismo, la intolerancia y la radicalidad de las llamadas políticas identitarias».
En este sentido, ha asegurado que eso, que ya pasa en Estados Unidos como demuestra el ‘manifiesto Harpers’, empieza a pasar también en España, que llama a combatir «el dogmatismo, la censura, la intolerancia de una determinada izquierda identitaria». «Esto no es un debate sobre las formas, sino sobre el fondo de la política y el proyecto político de centro-derecha español», ha apostillado.
Además, ha dicho que esa alternativa no se puede diseñar su proyecto ni mirando por el retrovisor a Vox ni a lo que hace la izquierda o el nacionalismo, «que son los que han dicho quienes somos moderados o radicales en la España democrática».
«Creo que sí se dan las condiciones para una mayoría nueva, para una nueva transversalidad española, que no es la unión de todo lo que está a la izquierda o la derecha sino que hoy en día es la unión y la suma de todo lo que está al lado de la razón y los valores de la Ilustración», ha aseverado.