Un juez ha autorizado la vigilancia policial a una familia de la ciudad de Huesca, compuesta por cuatro miembros, dos padres y dos hijos, que la semana pasada dieron positivo en la COVID-19 y se ha comprobado que se estaban saltando el confinamiento.
Tras tener conocimiento de estos hechos, responsables del Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón han presentado una resolución ante el juzgado, que ha decidido autorizar la vigilancia de esta unidad familiar con el objetivo de lograr que cumplan con el confinamiento y así evitar la propagación del coronavirus.
Las tareas de control las están realizado la Unidad de la Policía Nacional adscrita al Gobierno de Aragón, así como efectivos de la Policía Local de Huesca y la Policía Nacional, ha informado fuentes municipales y de la Comisaría Provincial.
También está en cuarentena desde el pasado fin de semana un asentamiento chabolista ubicado en la zona Loma Verde de Huesca por la aparición de contagios de la COVID-19 entre sus moradores, quienes sí están cumpliendo con el aislamiento.
Allí, tiene lugar una vigilancia puntual y el Ayuntamiento de Huesca ha estado en contacto con quienes viven en él por si tienen necesidades de servicios sociales, como puede ser de alimentos, para facilitárselos.