Una empresa de seguridad privada se ocupa de garantizar el cumplimiento de la cuarentena de los 29 temporeros confinados por coronavirus en el pabellón de la localidad oscense de Albalate de Cinca.
Hasta ahora, eran los efectivos de la Guardia Civil quienes se encargaban de esta tarea, pero desde el viernes es una empresa de vigilancia privada la que la lleva a cabo. El alcalde de Albalate, Ricardo Charlez, ha explicado que se trata de una decisión adoptada por el Ayuntamiento debido a las diversas labores que tienen los agentes de la Benemérita en la comarca.
«La Guardia Civil no se puede encargar de esta tarea» porque en el medio rural «tiene muy pocos efectivos para controlar todas estas situaciones» y «no era viable», ha contado el alcalde. La empresa privada ha organizado a sus trabajadores en tres turnos «y dan un servicio de control y, en caso de que ocurriese algo, tienen que dar aviso a la Guardia Civil», ha apuntado el alcalde.
Charlez ha comentado que en los alrededores del pabellón está todo «tranquilo» y ha informado de que el objetivo de la empresa de vigilancia privada «es que se cumpla la cuarentena y que no se aglutine mucha gente alrededor del pabellón, como pasaba los primeros días con los medios de comunicación.
No obstante, «llevamos unos días muy tranquilos, sin nada destacable». Además de recurrir a guardias privados, se ha optado por reforzar la labor de los mediadores, tarea que llevan a cabo Cáritas y Cruz Roja y a la que este lunes se ha sumado la ONG Accem.
Charlez ha resaltado la importancia de este trabajo. «Es un punto de confinamiento» y «algunos no tienen muy claro su por qué, ya que no tienen síntomas», pero «los mediadores están trabajando con ellos y también actúan de intermediarios entre el interior y el exterior», ha glosado el alcalde.