sábado, 23 noviembre 2024

Llegan las primeras críticas a Orban desde la Unión Europea

El primer ministro de Hungría, Viktor Orban, quien actualmente ostenta la presidencia semestral de la Unión Europea, no tiene autorización para representar al bloque en un posible viaje a Rusia, según declaró este viernes Josep Borrell, jefe de la diplomacia europea.

En una declaración oficial, Borrell enfatizó que Orban «no ha recibido ningún mandato del Consejo de la UE para visitar Moscú».

Orban, actual presidente de la UE

Esta afirmación subraya la postura firme de la UE en relación con Rusia, especialmente en el contexto de la guerra con Ucrania. Borrell aclaró que «la posición de la UE sobre Rusia excluye los contactos oficiales entre la UE y el presidente ruso Vladimir Putin. Por tanto, el primer ministro húngaro no representa a la UE de ninguna forma».

El 1 de julio, Hungría asumió la presidencia rotativa de la UE, y al día siguiente, Orban realizó una visita inesperada a Ucrania. Durante esta visita, se reunió con el presidente ucraniano Volodimir Zelenski y pidió un cese de hostilidades con Rusia para facilitar las negociaciones de paz. Este movimiento provocó especulaciones sobre un posible viaje de Orban a Rusia.

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Orban no representa a la UE en Rusia

El jueves por la noche, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, reafirmó en la red social X que «la presidencia rotativa de la UE no otorga un mandato para contactar a Rusia en nombre de la Unión Europea». Esta declaración refuerza la idea de que cualquier acción de Orban hacia Rusia no sería en representación de la UE.

En una entrevista concedida a la radio estatal húngara este viernes, Orban argumentó la necesidad de tomar medidas proactivas para alcanzar la paz. «Si solo nos quedamos sentados en Bruselas, no seremos capaces de aproximarnos a la paz. Es necesario tomar acciones», afirmó el primer ministro húngaro.

Las declaraciones de Borrell y Michel reflejan la postura unificada de la UE frente a la agresión rusa en Ucrania, destacando la importancia de mantener una posición coherente y alineada en las relaciones internacionales del bloque. Mientras tanto, las acciones de Orban continúan siendo objeto de escrutinio y debate dentro del contexto europeo.