Santiago Abascal quiere frenar a su exaliado Alvise Pérez con la bandera antiinmigración. El líder de Vox, católico practicante, desoye la doctrina de la Conferencia Episcopal, que a través de su portavoz César García Magán ha arremetido contra la «demagogia ideológica» utilizada por la extrema derecha para vincular «inmigración y delincuencia».
«Hay que hacer una clarísima diferenciación, porque si no sería demagogia ideológica el vincular delincuencia e inmigración. Son dos cosas absolutamente distintas», aseguró García Magán en rueda de prensa.
La defensa a la vida «no es quedarse solo en la vida no nacida», señaló sobre los antiabortistas, sino que «incluye también el apoyo a los emigrantes, a los pobres, a los necesitados, a las mujeres maltratadas, a las nuevas esclavitudes y el apoyo a los que están en una situación de drogodependencia».
Vox hace caso omiso y, a raíz de la Conferencia Sectorial para repartir a menores no acompañados en diversas regiones , ha presentado una moción en el Senado en el que vuelve a relacionar delincuencia con inmigración.
Dice la formación de Abascal que «van conociéndose cada vez más casos de agresiones, robos e incluso homicidios a cargo de menores extranjeros no acompañados en España» y señala que algunos políticos «llaman irresponsablemente a la inmigración ilegal masiva» al tiempo que «se esfuerzan ocultar la nacionalidad de los culpables de la devastación que ellos mismos han provocado».
«En lugar de defender los intereses y necesidades de los españoles y de proteger el interés superior de los menores, que no es otro que volver con sus padres a su hogar, en su país de origen, han optado por utilizar a menores sin sus padres para implantar una agenda de multiculturalidad dictada más allá de nuestras fronteras y han decidido entregar nuestra soberanía, libertad y seguridad al mejor postor», afirman.
Afirma Vox que no puede «tolerar que haya menores extranjeros sin la compañía de sus padres en una nación que no es la suya», por lo cual piden «tramitar de forma preferente y urgente la inmediata expulsión de todos los inmigrantes que accedan ilegalmente a nuestra nación, así como de aquellos inmigrantes legales que cometan delitos graves o hagan del delito leve su forma de vida».
La tercera formación del Congreso dice que «con objeto de evitar el efecto llamada, la iniciativa contempla suprimir toda ayuda y beneficio social a los inmigrantes ilegales que han entrado en España vulnerando las leyes españolas y comunitarias, a excepción de las ayudas humanitarias que precisen hasta la devolución a sus países de origen».
ABASCAL, CON ORBAN
Abascal también ha anunciado que Vox se sumará en el grupo europeo del presidente húngaro Viktor Orbán: «En esta legislatura vamos a formar parte de la plataforma Patriotas por Europa, que trata de aunar al mayor número de fuerzas patrióticas y soberanistas. Vox ha estado trabajando desde hace mucho tiempo por la colaboración de todas esas fuerzas, por la posible creación de un gran grupo».
Eso sí, Vox no quiere cortar sus lazos con otras mandatarias como Giorgia Meloni, de la que finalmente parecen alejarse: «Vamos a seguir haciéndolo en esta legislatura a través de la nueva plataforma, pero con una relación especial, por supuesto, con aquellos aliados que aún no están en ella y con quienes seguimos teniendo una relación bilateral estrechísima», aseguró Abascal.