En un giro de acontecimientos en el Aeropuerto de Loiu en Bilbao, un joven saharaui se enfrenta a su devolución a Marruecos después de que las autoridades le denegaran su solicitud de asilo. Este caso ha generado preocupación y debate entre defensores de los derechos humanos, quienes temen por la seguridad del joven al ser enviado de vuelta a su país de origen.
La detención del joven saharaui en el aeropuerto se remonta a hace 12 días, cuando las autoridades españolas decidieron denegar su petición de asilo. Desde entonces, el individuo ha permanecido bajo custodia policial, enfrentando la amenaza constante de ser deportado. Ante esta situación, el joven ha optado por emprender una huelga de hambre para denunciar los riesgos que enfrenta si es enviado de vuelta a Marruecos.
Devolución Frustrada y Nueva Fecha de Repatriación
A pesar de los esfuerzos del joven saharaui por evitar su deportación, la semana pasada se programó su vuelo de regreso a Marruecos. Sin embargo, en un giro inesperado, el piloto del vuelo de la compañía Air Arabia se negó a llevar al joven a bordo, alegando que el vuelo «no era seguro» con él presente. Esta decisión del piloto ha retrasado temporalmente la repatriación del joven, quien ahora será devuelto a Marruecos en un vuelo programado para este próximo domingo.
Según las autoridades policiales, el joven ya no tendría «inconveniente» en viajar a Marruecos en este nuevo vuelo. No obstante, defensores de los derechos humanos expresan su preocupación por el bienestar del joven saharaui, temiendo que su seguridad pueda estar en riesgo al ser enviado de vuelta a su país de origen.
Condición de Salud y Proceso Legal
Durante su estancia en el Aeropuerto de Loiu, el joven saharaui ha sido trasladado al hospital para ser sometido a un chequeo médico y verificar su estado de salud, luego de haber iniciado una huelga de hambre. Tras las pruebas realizadas, el joven fue dado de alta y regresó al aeropuerto, donde permanecerá hasta su devolución a Marruecos este domingo.
Cabe destacar que la Audiencia Nacional denegó la medida cautelar solicitada para evitar la deportación del joven saharaui. Esta decisión judicial ha sido criticada por organizaciones defensoras de los derechos humanos, quienes consideran que el proceso legal no ha sido lo suficientemente exhaustivo para garantizar la protección del individuo.
En medio de la incertidumbre y la preocupación por la seguridad del joven saharaui, este caso ha generado un debate sobre los desafíos que enfrentan los solicitantes de asilo y la necesidad de asegurar que los procesos de deportación se realicen de manera justa y respetuosa de los derechos fundamentales.
