Es la profesión más tradicional y quizás la más fácil de llevar adelante. Sin embargo, en Londres quienes quieran ejercer esta profesión no tienen el camino sencillo y deberán rendir un examen.
The Knowledge se llama la prueba que todos los ingleses deben enfrentar si quieren ser taxistas.
Esta instancia es conocida mundialmente como ‘el examen imposible’ por su enorme dificultad y es tan riguroso, que muchos demoran años en aprobar como corresponde. Esta medida no es nueva, sino que data de 1865 y se mantiene en la actualidad.
Cómo es el ‘examen imposible’ necesario para ejercer esta profesión
Aunque muchos consideran que ser taxista no es tarea difícil en tiempos de la tecnología, en Londres la cosa no se pone fácil para quienes quieren manejar este medio de transporte. Esta prueba consiste en memorizar el mapa de la capital inglesa, sus 25.000 calles y todo lo que hay en ellas como hoteles, restaurantes, estaciones, paradas de bus, cines, teatros, iglesias, parques, comisarías y más.
Esta prueba es tan complicada que los aspirantes tienen una preparación previa de años y se presentan muchas veces antes de aprobar de manera definitiva. Una de las particularidades de Londres son sus taxis negros (black cab) y, para quienes quieran conducirlos, deben asistir a la “Knowledge Point School”, donde se ofrece la preparación necesaria para este tipo de profesión. Además, mantienen material de consulta para poder estudiar y todos recurren al Blue Book, que incluye 320 rutas que cruzan Londres en distintas direcciones y toda la información que se precisa para poder aprobarlo.
Más detalles de la prueba para llegar a esta profesión
Como cualquier examen de esta dificultad, The Knowledge tiene varias instancias que los postulantes deben superar para llegar a poder iniciar esta profesión. La primera etapa es un examen «multiple choice», con preguntas sobre las rutas que están en el Blue Book y todos los sitios más importantes de la ciudad. En este paso, se debe superar el 60 por ciento de las respuestas correctas. La segunda parte cuenta con exámenes orales donde se le pregunta al alumno sobre dos sitios importantes en el que tiene que trazar el modo de poder llegar a ellos con el camino más breve.
Cada etapa de este examen requiere de puntos pero, si se suman pocos de ellos, el aspirante debe retroceder y volver a realizarla. Finalmente, la prueba se supera con un último test en el que debe saber las 25 rutas adicionales en el área metropolitana de Londres. Una vez aprobado eso, el solicitante puede pedir su licencia para ejercer su profesión y ya conducir su Black Cab. Sin embargo, todo esto no es barato porque quien quiera ejercer esta profesión, deberá pagar el costo de la mensualidad del Knowledge Point School y los exámenes médicos.
