La consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha manifestado que si bien se está dando una tendencia ascendente en el número de contagios de la COVID-19 en la Comunidad autónoma y las cifras absolutas de infectados diarios pueden ser similares a las que hubo durante el confinamiento, «no es comparable la situación actual» ya que «no hay estrés en el sistema sanitario».
En declaraciones a los medios de comunicación, con motivo de la recepción de dos respiradores donados por el Banco Santander, la consejera de Sanidad ha subrayado que no es comparable «ni el perfil de los contagiados, que es gente joven asintomática o con pocos síntomas, ni el perfil de estrés del sistema sanitario».
Al respecto, ha remarcado que «no se está produciendo» saturación en los hospitales, «ni en la ocupación de las camas, que no tiene nada que ver» con los peores momentos de la pandemia, ya que hay 71 personas hospitalizadas por la COVID-19, cuando en otras situaciones «con el mismo número de contagios había 1.400» y «tampoco en el número de pacientes que están en UCI, que en este momento es anecdótico». Este miércoles había cinco personas.
Las cifras notificadas por Aragón de infectados en los últimos días han sido de 68 casos el viernes, 10 de julio, otros 68 el sábado, 128 el domingo, 32 el lunes, 83 el martes y 166 este miércoles. En uno de los peores momentos de la pandemia, la cifra de nuevos positivos fue de 209 el 2 de abril, 199 el día 3, 179 el 4 y 154 el día 5 de abril.
Entonces, los pacientes hospitalizados y en UCI fueron el día 2 de abril 1.066 –157 en UCI y 909 en planta–, el día 3, 1.106 –163 en UCI y 943 en planta–, el 4 de abril, 1.112 hospitalizados –165 en UCI y 947 en planta– y el 5 de abril, 1.062 camas –166 en UCI y 896 en planta–.
La consejera ha apuntado que en los últimos días sí que ha habido algo más de frecuentación en las urgencias, «pero nada que ver con el perfil de enfermos que podíamos tener en otras ocasiones» ya que también las personas que ingresan, la mayoría en planta, son más jóvenes que en los peores momentos de la pandemia.
MOMENTO COMPLICADO
Repollés ha reconocido que Aragón vive un momento «complicado» por la fase ascendente de contagios, pero «estamos controlando los casos», «nos anticipamos a las situaciones epidemiológicas» y «todos estamos trabajando por salir de esta situación» por lo que «creo que vamos sobre la línea correcta».
A su entender, el hecho de que la Comunidad lidere el número de contagios en España podría deberse, por un lado, «al efecto temporeros, que es donde se inició todo» y «ha sido un detonante que nos ha obligado a tomar medidas desde un primer momento», y, por otro, a que, «a lo mejor, nos hemos adelantado en algunas fechas a las situaciones que se puedan dar en las mismas circunstancias en otras Comunidades autónomas».
La consejera ha indicado que no se están produciendo casos en personas mayores y sobre cuándo se podría producir el pico de contagios ha comentado que no hay una previsión. «Solo podemos trabajar con tendencias y cuando tienes una visión epidemiológica a largo plazo y la tendencia es ascendente, es el momento de actuar», ha glosado.
Por eso, se ha optado por aplicar la Fase 2 flexibilizada en los territorios donde se está produciendo esa tendencia, en la Comarca Central, donde está la capital aragonesa, en el municipio de Huesca y las comarcas de Bajo Aragón-Caspe, Cinca Medio, Bajo Cinca y La Litera, donde se iniciaron los brotes en trabajadores de empresas hortofrutícolas.
ACCIONES
Repollés ha recalcado que se están realizando muchas pruebas PCR, algo que hace «que tengamos mucha detección de positivos asintomáticos» y se harán «todas las que hagan falta». Además, ha apuntado que a pesar de que en Zaragoza ya se está comenzado a producir transmisión comunitaria de la COVID-19, «estamos en disposición de realizar los rastreos» de los contactos.
Según ha precisado, «los equipos de Atención Primaria están funcionando muy bien» y «está muy normalizada la forma de realizar los rastreos». En caso de que haga falta algún refuerzo en alguno de los equipos de Atención Primaria, «está previsto» en función de la dinámica de la curva de contagio, ha contado.
Repollés ha asegurado que Aragón dispone de reservas estratégicas de material y equipamiento, así como de recursos humanos, en los que se ha hecho un «esfuerzo importante» por lo que el sistema sanitario «está preparado en estos momentos para soportar una posible presión, si es que ésta llegase a producirse».
Ha añadido que no estima necesario «arbitrar ninguna medida más especial», si bien ha aclarado que «nada se descarta» y «determinaremos las medidas necesarias en el momento a que nos obligue la situación epidemiológica», ha manifestado tras ser preguntada por la posibilidad de decretar un confinamiento, ha remarcar que «no todo es previsible».
BROTE EN ALBALATE DE CINCA
La consejera de Sanidad ha señalado que el brote surgido esta semana en un grupo de temporeros del municipio oscense de Albalate de Cinca, en la Comarca del Cinca Medio, que supera la veintena de casos positivos, está «controlado» y la intervención es «exhaustiva», rastreando los contactos y realizado las PCR necesarias «sin ninguna restricción».
Repollés se ha referido al paso del municipio de Huesca a Fase 2 flexibilizada, que «no obedece a ninguna otra circunstancia más que las puramente epidemiológica y para evitar la transmisión comunitaria».
Este jueves, la consejera se ha reunido con el alcalde de Huesca, Luis Felipe, y con la subdelegada del Gobierno de España en Huesca, Silvia Salazar, así como con la consejera de Presidencia de Aragón, Mayte Pérez, para coordinar la respuesta al coronavirus en la capital oscense.
«Ha sido una reunión cordial», «no creo que hay ningún malestar» y el encuentro forma parte «de la obligatoriedad de reuniones, igual que me reuní este miércoles con el alcalde de Zaragoza». «Es la situación epidemiológica la que obliga a realizar estas medidas en la ciudad», ha enfatizado, aunque los nuevos casos no son muy numerosos, dos este miércoles.