Usar uñas acrílicas se ha convertido en una opción muy popular para aquellas personas que disfrutan de tener una manicura linda, arreglada y duradera. Sin embargo, el uso de este tipo de esmaltado tiene diferentes riesgos para la salud y uno de ellos está en el tipo de removedor que se utiliza para retirar el material.
Aunque usar las uñas acrílicas no debería traer daños inmediatos y su uso, en general, suele ser seguro, hay algunas advertencias que los especialistas de la salud han dejado claro. Los removedores de este material tienen ingredientes que pueden resultar peligrosos para la salud y, por eso, médicos y expertos recomiendan evitarlos en todo momento. Aquí te explicamos las razones.
Por esta razón debes evitar los removedores de uñas acrílicas
Uno de los principales componentes de estos removedores es la acetona, un químico que actúa como disolvente y puede casar graves daños en la uña y en la piel. La sequedad, fragilidad, irritación y alergias son solo algunas de las consecuencias que, comúnmente, se generan con el uso de la acetona. A largo plazo, algunos estudios sugieren que la acetona está asociada a un mayor riesgo de padecer algunos tipos de cáncer, aunque es necesario realizar más estudios al respecto.
Otro ingrediente que puede ser nocivo para la salud y se encuentra en removedores de esmaltes es el metanol. Este es componente tóxico que puede generar daños en el sistema nervioso central y puede provocar dolores de cabeza, náusea, vomitos, mareos y visión borrosa. A largo plazo, puede causar daños permanentes en el sistema nervioso, el hígado y los riñones. Los expertos recomiendan evitar a toda costa la exposición a este producto, de modo que es crucial evaluar las etiquetas de este tipo de removedores.
¿Cuáles son las alternativas para remover las uñas acrílicas?
Aunque la acetona es un método para remover uñas acrílicas, existen alternativas mucho más seguras que podemos utilizar. En primer lugar, están los removedores sin acetona, que contienen acetato butilio y son menos dañinos. Otra opción es usar acetona diluida, que tienen un efecto menos agresivo en las uñas y piel. Además, hay técnicas como el método de envoltorio que ayuda a ablandar las uñas acrílicas sin necesidad de usar exceso de químicos.
Una de las alternativas más utilizada en la actualidad es el limado profesional, en el que el manicurista lima de forma gradual para eliminar el acrílico de las uñas sin la necesidad de utilizar removedores. Esta opción es ideal para aquellas personas con mayor sensibilidad, ya que no hay necesidad de usar ningún tipo de químico.
