Si Martin Scorsese hoy es una leyenda del cine, en parte se lo debe a Robert de Niro, su íntimo amigo que en un momento de la vida del director logró cambiar su destino de una manera impresionante. Incluso en estos días ellos dos siguen trabajando juntos y demostrando que la lealtad entre ambos es muy grande y que uno no olvida lo que hizo el otro para salvarle.
Es de público conocimiento que a lo largo de sus carreras, Martin Scorsese y Robert de Niro trabajaron juntos en muchas producciones importantes que en muchos casos lograron transformarse en verdaderas obras de arte aclamadas por la crítica y el público. Nada de eso hubiera sucedido si el actor que hoy tiene 80 años no hubiera hecho su jugada maestra.
El comienzo de la historia de Robert De Niro y Martin Scorsese
Lo concreto es que Robert De Niro realmente salvó la vida de Martin Scorsese con una frase. Todo comenzó luego del gran éxito de ‘Taxi Driver’, que con una inversión de apenas poco más de un millón de dólares logró ganar más de 28 millones de la moneda estadounidense. Subido a la cresta de la ola, el director que hoy tiene 81 años decidió hacer ‘New York New York’, pero fue un fracaso rotundo.
Tras el fracaso de la película estrenada en 1977, Martin Scorsese cayó en una dura depresión y en una consecuente adicción a la cocaína. Más allá de que el propio Robert De Niro intentó sacarle de ese lugar, él no podía salir de ahí. De hecho ignoraba todas las propuestas laborales e ideas magníficas que tenía el actor protagonista de ‘Taxi Driver’.
Finalmente Martin Scorsese aceptó la ayuda de Robert De Niro
El destino de Martin Scorsese parecía tener únicamente dos caminos: aceptaba la ayuda de su íntimo amigo que no lo dejó solo nunca, o seguía en en el rumbo de las adicciones y tiraba su carrera por la borda a causa de esto. Sin dudas para cualquier persona sería fácil elegir, menos para alguien que cayó en este oscuro agujero. No obstante, el actor lo convenció.
Un día mientras estaba en un sanatorio a causa de haber consumido cualquier cosa, Robert De Niro lo visitó y le dejó bien en claro su idea: hacer una película sobre Jake LaMotta, el boxeador hambriento de sangre, con rabia sadomasoquista y celos sexuales (‘Toro Salvaje’). Scorsese aceptó y hoy en día es uno de los directores más importantes de la historia.
