La quinta gala de la temporada 12 de MasterChef se ha saldado con dos bajas entre los participantes: por un lado, David resultó expulsado, mientras que, por otro, Tamara decidió abandonar voluntariamente las cocinas del programa de TVE.
Tamara decide dejar el programa
Para empezar, fue esta negativa a continuar la que levantó numerosas ampollas, tanto dentro como fuera del talent show culinario, con los espectadores echándose encima de Jordi Cruz por la forma en la que gestionó su salida.
Por otra parte, hay que remontarse a la cuarta entrega para ver el primer gran síntoma de que Tamara no estaba haciéndose al formato, con la concursante verbalizando que no se veía montando su propio restaurante, completamente desubicada dentro del formato.
La polémica despedida de Masterchef
Ahora, en lugar de echarla en esa ocasión, los jueces decidieron sacrificar a otra participante que sí estaba peleando por su sueño, una decisión que en última instancia acabó volviéndoseles en contra.
Ahora, Tamara, incapaz de continuar, tiró la toalla: «Me voy, me despido voluntariamente porque no me siento a gusto. Tampoco estoy dando todo lo que me gustaría, constantemente estoy nerviosa, tensión, presión,… entiendo que esto es un programa, pero al final todos tomamos una decisión y yo quiero tomar esta decisión».
Las reacciones y críticas
También, las reacciones entre los seguidores del formato, y del público en general, no se hicieron esperar, con una amplia mayoría de espectadores censurando las formas del jurado, y muy especialmente de Jordi Cruz.
Está claro que no solo eso, sino que las críticas hacia el formato por el trato a sus participantes iban más allá, clamando directamente contra TVE por emitir un espacio en el que se están sobrepasando ciertos límites. Mikel López Iturriaga (El comidista), lanzaba la pregunta clave: «¿Es normal que en la televisión pública se trate así a un concursante por el simple hecho de querer dejarlo?».